Deste Littium by Kaos han desarrollado un nuevo modelo: la Ibiza, la e-bike plegable que ya era una referencia en el sector, da un salto de calidad para convertirse en la Ibiza Dogma, un modelo que llega al mercado a un precio magnífico: 1.590 € en puntos de venta (100 € más si se compra en la Web). La Ibiza Dogma da para mucho: ofrece una movilidad total: el motor Littium y su, batería Samsung, junto a un peso inferior a 20 kilogramos, proporcionan una autonomía magnífica, que puede llegar a los 70 kilómetros. Pero hay mucho más. Si la Ibiza ya era magnífica, las mejoras que trae la Dogma son abundantes y fundamentales. Su horquilla delantera incorpora un amortiguador Zoom Aria, las llantas de 20 pulgadas son reforzadas, el cambio es el Shimano Altus con siete velocidades, el cuadro de aluminio puede ser blanco o negro y se incorporan unos puños ergonómicos para hacer aún más placentero el rodar cotidiano. Incluye detalles prácticos como el portabultos trasero y las luces LED, cuenta con cinco niveles de asistencia al pedaleo, preinstalación para soporte de botellín y, una vez más, se convierte en una de las plegables más sólidas del mundo, capaz de transportar a un ciclista de hasta 120 kilos de peso: una máquina pensada para hacerle muchos kilómetros, con la máxima diversión y seguridad.
Berlín es la apuesta Vintage de Littium by Kaos, el objetivo es ofrecer una bicicleta clásica en todos sus detalles, a la vez que sofisticadamente tecnológica. Todas las bicicletas eléctricas tienen un exceso de cableado, este es el motivo principal para desarrollar un nuevo concepto de bicicleta. El modelo Berlín dispone de toda la potencia de una buena bicicleta eléctrica pero el interface entre la bicicleta y el usuario ha desaparecido. Los acabados mantienen un aspecto clásico, siendo de alta tecnología y máxima calidad. Se han seleccionado los mejores componentes para ofrecer una bicicleta longeva y fiable. Es la primera bicicleta eléctrica libre de cableado con un aspecto tradicional. El sistema DAO evita la necesidad de un mando de control ya que la bicicleta es adaptativa a nuestra conducción y permite que la controladora administre la potencia al motor en base a la conducción de cada usuario. Este sistema permite una optimización de la energía y evita al usuario tener que estar pendiente de la gestión de la potencia de la bicicleta. Al ser un sistema que se gestiona por sí solo, no es necesario el tradicional display en el manillar. Es por ello que la bicicleta Berlín se puede considerar la primera bicicleta eléctrica 100% libre de cables (wireless).
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