Rui Costa: “No me pongo metas en el Giro”

En su décimo año como profesional, Rui Costa debutará en el Giro del centenario. “Hay que probar nuevas aventuras", dice el reciente vencedor del Abu Dhabi Tour.

Ainara Hernando / Fotos: Bettiniphoto

Rui Costa: “No me pongo metas en el Giro”
Rui Costa: “No me pongo metas en el Giro”

Es el corredor más en forma de este inicio de temporada. Rui Costa ha sorprendido a propios y extraños desde que debutó en la Vuelta a San Juan con su triunfo en la etapa reina del Alto Colorado. De ahí fue al Tour de Omán, donde terminó segundo y rozó la victoria en tres etapas. Del golfo pérsico se ha traído el éxito más importante, el de casa en el Tour de Abu Dhabi, el patrocinador que rescató a última hora al extinto Lampre tras el abandono del capital chino. A Rui Costa no se le ha olvidado el castellano que tan bien aprendió en sus años con el Movistar el equipo que le hizo ciclista y al que vistió con el arcoíris de Florencia en el 2013, “aunque me cuesta porque mezclo con el portugués y con el italiano que ahora hablo más en el equipo”. Y así comienza a hablar.

¿Ya con 30 años has descubierto qué tipo de corredor eres?

Hasta ahora lo que he visto es que las carreras de un día, sobre todo las clásicas de las Ardenas, me gustan mucho y se me adecuan muy bien, igual que las carreras de una semana. Me falta descubrir las de tres semanas, no he tenido mucha suerte en los últimos dos o tres Tours. Uno porque tuve problemas de salud, otro que me caí… fueron una serie de circunstancias que no me dejaron hacerlos bien. A ver este año en el Giro, que es una carrera diferente, más abierta que el Tour y el clima, el frío, me irá un poco mejor. Hay que probar nuevas aventuras. No será fácil porque es el centenario, hay muchas estrellas. No voy a ponerme metas, un puesto a conseguir. Voy tranquilo, lo quiero hacer bien.

¿Estás en la edad que es mejor especializarse en cierto tipo de carreras?

Hay que mirar adelante viendo las carreras que hice hasta aquí, los puestos que he hecho. Por el momento no puedo descartar las carreras de un día ni de una semana. Me gustaría mucho hacer bien una grande. Hasta ahora mi especialidad han sido carreras de un día y de una semana pero hay tiempo suficiente para poder trabajar y preparar bien una gran vuelta.

En las carreras de una semana más duras siempre estas entre los diez primeros.

Todas las temporadas me gusta meter al menos una gran vuelta porque es una buena base para mejorar año a año. Este año hago el Giro y no descarto hacer carreras de una semana que me gustan. La París-Niza me gusta mucho pero este año cambio a Tirreno. El calendario italiano es nuevo para mí, no conozco bien los puertos ni las carreteras. Es importante tener la cabeza en el sitio correcto y las piernas bien y después estar cerca de los rivales que luchan por la general. Normalmente las temporadas para mí es una combinación de todo, me gusta no especializarme en un tipo de carrera.

Cuando te fuiste de Movistar a Lampre pasaste a ser uno de los líderes de un equipo a ser el único, ¿fue difícil?

No, el cambio lo hice por eso. En Movistar con Nairo y Alejandro era un poco difícil ser líder en las carreras que quería. Lampre me dio la oportunidad de ser líder en las carreras que quería hacer, por eso cambié de equipo.

¿Más difícil o más fácil ser el único líder de un equipo?

Era lo que quería, en Movistar tenía mis días de ser líder pero por eso también, buscar un equipo que me dejara serlo en todas las carreras que quería, era lo que buscaba desde niño, un día ser líder de un gran equipo.

¿Volverás a la Vuelta a Suiza, tu carrera talismán?

Sí, me gusta mucho. Será por tanta gente portuguesa que me apoya en la carretera, es muy bonito cuando voy a Suiza y veo tantos portugueses, hay una comunidad muy grande. Poder haber ganado tres años consecutivos ha sido muy bonito, he trabajado mucho. Era una de esas carreras que me permitía ser líder Movistar y no dejé pasar la oportunidad. Ya en Lampre también quería ganarla. Hice buena preparación como Campeón del mundo, salió muy bien. De las tres que he ganado, el primer año la preparé muy bien y al final, con ganas de hacerlo bien y gané. El segundo hice una preparación más o menos porque quería llegar bien al Tour. Empecé un poco mal pero me salió perfecto y gané la segunda. La tercera me había preparado para estar bien en el Tour y al final pude ganar por tercera vez.

Ha pasado ya un tiempo pero ¿qué recuerdos te quedan del mundial de Florencia?

Son recuerdos muy buenos, uno de los más bonitos que tengo de mi vida, pero como corredor ambicioso que soy me gusta mirar adelante. Lo que he ganado siempre lo miro poco. Me dejó un eco grande en el corazón, recuerdo muchas veces ese Mundial, ha sido bonito. Para todos los corredores es algo fuera de lo normal cumplir el sueño de llevar el maillot arco iris. Esa ilusión se cumplió, pude correr con él y aún llevo el arco iris en los brazos. Ha sido un momento muy feliz en mi vida pero ahora toca trabajar y buscar nuevos retos.

¿Ha sido difícil llevar ese maillot?

No. Cuando llevas toda la vida pensándolo y un día lo logras es magnífico vestirlo durante un año y disfrutarlo. 2014 ha sido el mejor año que he tenido. Fue  espectacular, creo que el mejor para mí. En 2013 es cierto que gané en el Tour dos etapas y el Mundial pero en términos de clasificaciones creo que lo hice muy bien. Siento que el maillot me dio más fuerza para trabajar y hacer las cosas bien, para seguir mi trabajo. El arco iris es señal de que sigues el camino correcto, me dio fuerzas para continuar trabajando y seguir en esa línea.

¿Miras a menudo ese arco iris?

Sí, mucho. Una de las cosas que más aprecio en la ropa que llevo es esa. Sobre todo a inicio de temporada es de las primeras cosas que miro. Ya ha sucedido alguna vez de no venir en la ropa el arco iris ¡con lo que me ha costado ganarlo! Es de las cosas que más me fascina mirar.

Estabas muy contento el día que ganaste en Argentina, ¿tiene algo que ver con que no conseguiste victorias el año pasado?

Si, la verdad que sí. Me entusiasmé. Ganar es siempre ganar, sea donde sea. Poder ganar la etapa reina me gustó mucho. El año pasado no logré victorias después de buscarlo mucho. Iniciar el año con un triunfo y en un puerto, con tanta altitud y gente que estaba muy fuerte fue magnífico. Igual que en Abu Dhabi, una victoria muy importante en la casa del equipo. Ganar ante los mejores del mundo da mucha confianza. No me lo esperaba pero también es cierto que he trabajado mucho este invierno.

Ya has ganado en Argentina y en Abu Dhabi. Vas a correr la Tirreno y luego las Ardenas antes del Giro, ¿es mucho tiempo en un gran estado de forma?

Hay tiempo. He iniciado bien la temporada, hay que hacer bien la primera parte del año porque todos los que hacen el Giro demuestran que están en buena condición en las primeras carreras pero es cierto que no voy a estar así hasta mayo. Después de la Tirreno tengo un mes hasta las clásicas y estaré un poco tranquilo. Si miramos al calendario que hacía para el Tour tenía más carreras que este año y tenía el mismo tiempo de descanso justo antes. Hay veces que es mejor no relajarse mucho porque pierdes el ritmo. Además hoy en día no es como antiguamente, que ibas a ver cómo estabas la primera semana. Ahora hay que estar bien desde el inicio porque todo puede pasar, la primera semana siempre hay mucho nerviosismo y tienes que estar delante y atento a todo.

¿Harás las tres clásicas de las Ardenas?

Veré el nuevo recorrido de la Amstel en estas semanas y si no me favorece, haré solo la Flecha y la Lieja. Pero con el cambio es bonito que sea más abierta, para los espectadores seguro que es más interesante y a mí también me gustan más las carreras más abiertas, con muchos ataques. Puedo jugar mis cartas desde más lejos. La dureza la hacemos nosotros, los kilómetros de la carrera y el clima. Con o sin Cauberg la carrera será muy dura por todas las horas encima de la bici.

Rui, ¿Lo mejor está por venir?

No lo sé. Si miro mi progresión y mi palmarés, con 30 años creo que todavía queda mucho por delante. Estoy en una edad buena, donde tienes la experiencia, la resistencia y la cabeza. De 30 a los 35 es la edad magnífica. Ojalá sean años muy buenos. A partir de ahora hay que continuar trabajando porque sin trabajo no se consigue nada. Veré  hasta donde puedo llegar, solo espero que sean años buenos y felices.

¿Crees que dentro de 30 años la gente se acordará de ti?

Iba a decirte que no depende de mí pero algo sí. Me gustaría que sí. Yo hago lo que hago no pensando en el futuro, que la gente lo valore, lo importante es que hago lo que me gusta y si las cosas salen bien, tienes buenos resultados y buen palmarés es lo más satisfactorio que puedo tener. Tengo mucha gente que me sigue, en la carretera y en las redes sociales y me gusta verles felices, eso para mí es lo más importante.