Igor Antón se encuentra en una situación difícil: a 7 de octubre aún no conoce cuál será su equipo el año que viene y a cada día que pasa la situación se complica. Son fechas difíciles para encontrar acomodo en escuadras de primer nivel y el escalador vasco, a pesar de no haber renovado con el Movistar Team, quiere seguir en el World Tour, la máxima categoría del ciclismo profesional.
“Estoy tranquilo, a la espera, aunque sé de las dificultades. Busco un equipo grande, que dé las características. Podré aguantar hasta Navidades, donde espero tener algo antes. Si no es así, podría valorar hasta la retirada. Nunca se sabe, toca ser paciente", explica en una entrevista concedida al diario Marca en la que relata su situación pero demuestra no haber perdido el optimismo. “Estoy muy agradecido por todo lo que me ha dado el ciclismo. Si puedo seguir dentro, genial, pero si no no hay problema. Estoy en paz. Podría decir que he conseguido retos preciosos. Sé que a mi edad puedo continuar, pero vivo tranquilo con lo que pueda pasar”.
Antón reconoce que no está satisfecho con el nivel que ha mostrado durante esta temporada y que estas actuaciones por debajo de las expectativas han provocado su salida del Movistar Team. "Realmente no sé el motivo del rendimiento, no ha habido una cosa concreta. Fueron varias. Movistar es un equipo donde tienes que buscar tu sitio y quizá no lo he sabido encontrar. Hay mucha exigencia, el nivel medio de corredores es altísimo. Tanto yo como los directores no estamos contentos con lo logrado”. Pero aun así, asegura no haber perdido ni una pizca de amor por la bicicleta. “Me gusta tanto este deporte que, aunque ya he terminado la temporada, el otro día me hice 265 km, algo poco habitual, por puro placer. Me apetecía. Fui desde Galdácano hasta Santander y vuelta por la general. Cosas como estas las seguiría haciendo aunque ya no corriera como profesional. La bici es mi vida”, concluye un ciclista que aún tiene grandes ascensiones en sus piernas que brindar a los aficionados.