¿Qué te ha parecido esta Vuelta al País Vasco?
Ha sido una vuelta fenomenal, muy bonita para el aficionado. Doy las gracias al equipo por estar apoyándome. Es una carrera muy buena y he estado varias veces cerca de ganarla. Había conseguido victorias de etapa pero siempre se me resistía poder ganarla. Este año estoy en racha. La he conseguido con mucho esfuerzo porque ha estado muy reñida la crono pero al salir el último iba con referencias. Los compañeros ya me habían dicho que los últimos siete kilómetros se hacían muy duros, por eso he guardado todo lo que se podía para darlo todo en el final.
¿Tiene alguna dedicatoria especial este triunfo?
A todos los aficionados, a mi equipo a mi familia, a mis niños y a todo el mundo que siempre esta detrás de mi y siente el ciclismo. Uno solo no puede ganar, tiene que tener el equipo detrás, cuando uno va a ganar una carrera siempre tiene a su equipo alrededor, y yo lo tengo. Eso da mucha confianza.
¿En qué se ha basado esta victoria?
El no tener presión y llevar el gran inicio de temporada que llevo hace que te lo tomes todo con tranquilidad. Si la tienes y además cuentas con una buena forma, se juntan las dos cosas y ayuda a que te vaya mejor. Esta Vuelta al País Vasco ha sido diferente, menos dura pero siempre esta carrera se decide en la crono final.
¿Ahora el siguiente objetivo son las clásicas?
Allá donde voy siempre intento ganar si estoy bien. Con lo que he ganado este año voy con una tranquilidad tremenda a las clásicas, ya no hace falta que corra más este año (ríe). Llego muy bien, hay que aprovechar el estado de forma.
Con casi 37 años y un innumerable palmarés, ¿qué te dice este triunfo?
Dice mucho, por el inicio de temporada que llevo, que siempre he estado ahí cerca para lograr victorias y nunca lo he conseguido. Este año está saliendo todo, el equipo está fenomenal. Este triunfo tiene de especial que todos estamos súper motivados y todo va saliendo muy bien. En el ciclismo lo he hecho casi todo, antes corría presionado por querer ganar, tenía esa presión añadida de querer ganar todo. Cuando vas así te salen las cosas peor. Pero como tengo la forma y la tranquilidad, me ayuda a poder ganar.
¿Qué haces cuando acabas cada temporada?
Descanso 20-25 días, estoy sin hacer nada. Luego voy al gimnasio y correr a pie, andar por el monte… de todo un poco, también bici de montaña. Así desconecto, no solo hago bici de carretera. Después empiezo a entrenar con la grupeta de Murcia que hay de todo, ¡yo voy con los míos, los master 40! (ríe).
¿Te machacas mucho?
En el ciclismo no es a, b o c. No tienes que hacer tres horas y con tantas series…, lo importante es salir a entrenar, escuchar a tu cuerpo. Si hay días que te marca cinco horas y quieres hacer dos, yo hago dos. Si te machacas es peor. Mi entrenamiento es disfrute, salgo a entrenar y disfrutar, otros para coger forma necesitan machacarse muchísimo, concentraciones…yo siete horas entrenando no he hecho nunca. Yo voy a correr, hago cuatro carreras y estoy en forma. Entreno como todos pero no me cuesta trabajo el entrenar.
¿Qué te queda por conseguir? ¿El Mundial?
Sabía que me lo ibas a preguntar. Es lo que menos me obsesiona, si gano y soy Campeón del mundo sería la leche pero si soy sincero, a día de hoy me da igual. Ser campeón del mundo es la rehostia, pero con todo lo que he conseguido me da igual.
¿Qué les dices a los jóvenes cuando les ganas?
Están acostumbrados, les digo que hay que seguir trabajando. Con 22 yo estaba peor que ahora con 36.