La Vuelta a Asturias nos ha regalado muchas sorpresas y emociones pero probablemente la más agradable de ellas ha sido Fernando Barceló, ciclista oscense de 21 años que aún compite en el campo amateur con la Fundación Euskadi y que en la jornada decisiva, la que concluía en el Alto del Acebo, asombró a la comunidad ciclista con un sensacional tercer puesto solo superado por Nairo Quintana y Raúl Alarcón. Un resultado tremendo si tenemos en cuenta que era la primera vez que competía entre profesionales y que sirve para poner en relieve su enorme talento, que desde categorías inferiores le ha hecho ser señalado como una de las grandes promesas de la cantera nacional.
- Fernando, enhorabuena. ¿Haznos una valoración de la Vuelta a Asturias?
Muchas gracias. Solo tengo una palabra en la mente: increíble. He alcanzado objetivos que no me esperaba. Terminar tercero en el Acebo, tan cerca de un ciclista de talla mundial como Nairo, fue una pasada. En la salida no me lo hubiera imaginado. En la tercera y última etapa he acabado 12º, muy cerca de los primeros. Teniendo en cuenta el desgaste y esfuerzo de los dos días anteriores, estar tan cerca de los más fuertes la última jornada también lo valoro mucho. Acabo la vuelta muy, muy contento.
- Estas trabajando duro para conseguir este nivel...
Así es. Hay mucho trabajo duro para que el resultado en Asturias haya sido tan bueno. El apoyo de mi familia es imprescindible, y al equipo de la Fundación solo puedo darle las gracias por toda la ayuda, asesoramiento, consejo... Tienen mucha experiencia y se nota. Estoy en una nube y quiero seguir progresando.
- La subida al Acebo, nevando, al lado de Quintana... ¿Qué recuerdos tienes?
Fueron 30 minutos de subida, pero se me pasaron como si fueran 5, la verdad. Iba a todo, más no daba, pero el dolor en las piernas era diferente... Mirabas a un lado y estaba Nairo, al otro Sevilla, fue muy emocionante. Son ciclistas que he visto por la tele, que he admirado... y de repente, estas ahí con ellos. Increíble.
- ¿Llegaste a pensar en darles un susto e ir a por la victoria?
A falta de 5 kilómetros sí que pensé en atacar. No tanto pensando en la victoria, sabía que era muy dificil, pero sí en buscar ese protagonismo. A Nairo le veía muy bien, superior, por lo que ganar era complicado, pero si que pensé en buscar ese momento de arrancar y dejarme ver. Cuando atacó Nairo intenté seguirle, pero no pude.
- Este año ganaste en Laukiz después de un tiempo sin alzar los brazos. ¿Sensaciones con respecto a tu actuación en Asturias?
Las sensaciones en ambas carreras han sido muy diferentes e igualmente felices. En Laukiz fue decir 'aquí estoy, he vuelto'. Lo del Acebo fue 'ostras, hasta donde he podido llegar'. En general, estoy orgulloso de toda la temporada, no solo de estos dos momentos puntuales. Han sido dos momentos muy importantes, pero valoro todo el año.
- Imagino que con la moral por las nubes para los siguientes retos.
Urraki y Vuelta a Bidasoa son las dos siguientes pruebas y espero hacerlo lo mejor posible. Ganar es muy complicado, y el haber hecho tercero en el Acebo no quiere decir nada de cara a estas carreras. El objetivo es dar el máximo y acabar satisfecho, con la sensación honesta de haberlo dado todo.