120 organizaciones defensoras de los derechos humanos piden que el Giro no salga de Israel

Han emitido un comunicado en el que solicitan a la organización de la Corsa Rosa que desplace la salida de la edición de 2018 a otro país para no incrementar el sentimiento de impunidad con Israel por la ocupación militar y la constante vulneración de los derechos humanos del pueblo palestino.

Carlos Faba

120 organizaciones defensoras de los derechos humanos piden que el Giro no salga de Israel
120 organizaciones defensoras de los derechos humanos piden que el Giro no salga de Israel

Más de 120 organizaciones y asociaciones defensoras de los derechos humanos han lanzado un llamamiento internacional esta semana para solicitar que la salida de la edición de 2018 del Giro de Italia no se realice desde Israel, tal y como está prevista, debido a las graves y constantes violaciones que realizan de los derechos de los ciudadanos palestinos.

En un comunicado publicado por la Coordinación europea de comités y asociaciones por Palestina denuncian que la compañía con la que trabaja el Giro de Italia para organizar la salida desde Israel, Comtec Group, cuenta con actividades en asentamientos ilegales israelíes; así como que la tercera etapa, la última que se celebrará en la región, atravesará docenas de aldeas beduinas palestinas a las que Israel niega proporcionar los servicios más básicos, incluyendo electricidad, agua, sanidad, escuelas y carreteras, los cuales han sido derruidas en más de 100 ocasiones. Estos organismos y asociaciones, además, reivindican que la celebración de la salida de la Corsa Rosa desde Israel aumentará la sensación de impunidad ante la ocupación militar y la constante vulneración de los derechos humanos del pueblo palestino. Por todo ello, solicitan a RCS Sports, organizador de la ronda transalpina, “mover la salida de la carrera a otro país para asegurar que no participa en las violaciones de la ley internacional y de los derechos humanos contra el pueblo palestino que realiza el estado de Israel” y recuerdan tanto a los equipos como a los patrocinadores que tomen parte las “consecuencias legales así como los daños en su reputación que pueden sufrir por colaborar con las instituciones y empresas israelíes involucradas en la violación de derechos humanos y de las leyes internacionales”.

Esta petición ha cobrado especial fuerza tras ser respaldada por el reconocido lingüista Noam Chomsky, de varios juristas de las Naciones Unidas, así como de miembros del Parlamento Europeo y de la antigua vicepresidenta de esta cámara Luisa Morgantini. Por último, cabe remarcar que varios grupos de la sociedad civil palestina han escrito al Papa Francisco para pedirle que rechace la invitación que el Primer Ministro israelí Benjamin Netanyahu le ha lanzado para estar presente en el comienzo de la carrera.