Pese a dejarse en Prato Nevoso la mitad de la ventaja que tenía con Tom Dumoulin (28”), el líder del Giro, el británico Simon Yates, no se mostraba muy nervioso tras la etapa. Así explica lo que le ocurrió en los dos últimos kilómetros, en los que no pudo seguir el ritmo de Froome, Pozzovivo y Dumoulin: “Lo intenté y me noté fatigado, sin fuerza suficiente para salir detrás de ellos. Pero no me voy a poner a llorar, no pasa nada, aún estoy al frente así que todo está bien. Aún faltan dos jornadas importantes en los Alpes y quizá haya que cambiar de táctica y pasar a la ofensiva. Ya veremos, depende de la energía y de cómo se desarrolle la carrera”.
Sobre el hecho de haber mostrado los primeros síntomas de debilidad en este Giro, Yates ha manifestado no preocuparle demasiado. “No tuve muy buenas piernas, pero qué le vamos a hacer. No estoy aterrorizado; debo continuar en la misma buena línea”.
Simon Yates cree que sus rivales correrán en los próximos días “al ataque, seguro”, y que él deberá responderles. “Por suerte, dispongo de un gran equipo alrededor, como demostró Mikel Nieve al ayudarme en la parte final de la subida”.
Buen día para Dumoulin
Dumoulin, ganador del Giro de Italia en 2017 y que es segundo en la general de la actual edición (a 28" de Yates), calificó el día como "bueno"."Estaba esperando el momento y, a dos kilómetros de la llegada quería ver qué era posible. Yates se quedó con mi primer ataque, luego Chris Froome atacó e intenté seguirles a él y a Pozzovivo. Por supuesto que es un buen día, pero los dos próximos van a ser diferentes y mucho más difíciles que hoy", comentó Dumoulin.
El alemán de 24 años Maximilian Schachmann (Quick-Step), ganador de la etapa tras una larga fuga junto a otros once corredores, reconoció sentirse "increíble". "Es genial ganar una etapa en mi primera gran vuelta. Todos coinciden en que es un Giro realmente duro, lo que hace que aún sea una mayor satisfacción ganar una etapa", apuntó.
Además, se mostró agradecido con su compañero de equipo Michael Morkov, integrante también de la fuga: "Una gran parte de esta victoria es para Morkov. La escapada ya estaba allí, él hizo de puente y me tomó a su rueda. No es la primera vez que me ayuda en esta carrera. Hemos compartido habitación y él ha compartido su experiencia conmigo".