Lo primero de todo quiero desearos un magnífico comienzo de año y salud máxima para este 2017. Suena a tópico lo de la salud, pero realmente es lo más importante, sin ella de nada sirve tener objetivos e ilusiones.
Las nuevas tecnologías están presentes desde hace unos años en nuestras vidas y cada vez más. En concreto las redes sociales más conocidas, como Instagram, Twitter o Facebook, nos han permitido ver los cambios de maillots de ciclistas o los colores de los nuevos equipos en el minuto “uno” del año. Terminadas las campanadas, muchos eran los deportistas que subían videos o fotos compartiendo sus nuevos uniformes con los aficionados. Cuesta en las primeras carreras descifrar quién ataca hasta que recuerdas que sí, que es él. Ventoso tirando del pelotón para BMC, Nicolás Roche a su rueda, Contador preparando su ataque con Trek, Javi Moreno protegiendo a Nibali en el Bharain, Juanjo Lobato preparando el sprint con Lotto, Iván Cortina trabajando en las clásicas de pavé en el mismo equipo que lo hace Izaguirre en las Ardenas …
Pero me apetecía realizar otra acción al observar sus fotos o videos. Mí mirada se dirigió a sus caras, quería buscar algo en sus expresiones faciales. Nerviosismo, compromiso, emoción, incertidumbre, motivación, miedo, ganas, liberación… una mezcla de emociones recogidas en sus rostros. Nunca antes había reparado en ello, pero observé que estas expresiones eran en muchos casos similares. Las expresiones de los nuevos profesionales se confundían en ocasiones con las de ciclistas veteranos que cambiaban de equipo. Afrontar un nuevo proyecto deportivo supone una inyección de motivación extra. El cambio viene dado por alguno de estos motivos; no renovación por parte del equipo en el que estabas, buscar una mejora económica, buscar una mejora en el trato personal, buscar una mejora en el aspecto deportivo, desaparición del equipo en el que te encontrabas. Estos pueden combinarse entre si, no ha de ser solo un motivo en concreto.
Recuerdo mis cambios de maillot y todos fueron distintos entre sí. El primero y más importante fue el de amateur a profesional, algo con lo que sueñas desde hace tiempo y que por fin ves materializado. Del equipo Relax Fuenlabrada, cambié de colores a Relax Bodysol. Después a Unibet tras el fracasado fichaje por Sony Ericson. Un cambio de idioma, de cultura, de carreras, por primera vez comenzaba a pasar largas temporadas fuera de casa. De Unibet a Caisse D´Epargne, de nuevo a casa, se terminaban las largas estancias fuera de España. De ahí a Movistar, pero supuso únicamente un cambio de colores, la estructura era la misma. Y por último a Colombia, otro cambio importante en lo deportivo y personal. Como veis todos distintos, pero he de reconocer que cada vez que se producía un cambio en mi carrera deportiva mis ilusiones y ganas aumentaban. A veces tenemos demasiado miedo al cambio, a lo desconocido, a lo nuevo. Nos cuesta abandonar una comodidad empresarial o deportiva y nos agarramos a la frase que todos hemos escuchado o pronunciado alguna vez:
Más vale lo malo conocido, que lo bueno por conocer
Para mi una frase pobre y conformista, vacía, paralizadora. Conocer y descubrir forman parte del crecimiento personal. Claro que los cambios no siempre son buenos, pero son necesarios para avanzar. Salir de una empresa en la que llevas años o abandonar un equipo que casi te vio nacer no supone un fracaso, supone abrir puertas a nuevos proyectos, aprender nuevos métodos de trabajo, conocer nuevos compañeros y aprovechar su talento para alcanzar objetivos comunes.
Por eso os invito a todos a cambiar aspectos de vuestras vidas en este 2017, a lanzaros a lo desconocido en algún momento, sin miedos, con ganas de descubrir y explorar. Os animo a no pronunciar esa frase de la que hablábamos, a no conformaros con lo conocido y a buscar lo nuevo, aunque descubramos que no era lo que esperábamos en alguna ocasión. Pero estoy convencido que veréis la importancia del cambio y sabréis darle valor. Suerte a todos los ciclistas que cambian de equipo, disfrutar del cambio, aprovecharlo. También suerte a todos los que no pueden continuar en el pelotón por no tener equipo para este 2017. No olvidéis que tenéis mucho por hacer y que seguís siendo valiosos. Descubrir vuestra fortaleza en el mundo empresarial y a seguir cruzando metas. Pase lo que pase, no te quedes quieto.
- Luis Pasamontes
- @pasamontesluis
- www.luispasamontes.com