“Acumulas rabia o qué sé yo. Y es un estímulo para demostrar que estamos ahí todavía. Con toda la mala suerte que tuvimos la temporada pasada igual fue un año de descanso y sirve para cogerlo este año con más ganas”. Dani Moreno y Alberto Losada ya han puesto las primeras pedaladas al año 2015. Ellos son los gregarios, los que se dejan la piel, los que abren el camino al líder. El suyo, Joaquín Rodríguez viene de una temporada aciaga. De una caída en la Amstel Gold Race en abril que le rompió una costilla cuando todo marchaba a la perfección. Menos de un mes después volvía a irse al suelo en el Giro de Italia y entonces todo se acabó. Tuvo que retirarse de la ‘corsa rosa’ con otras tres costillas fracturadas y el dedo roto. Y entonces todo se precipitó.
“Cuando todo se torció", rememora Losada retrotrayéndose a la pasada primavera, a las caídas y a la decisión a última hora de correr el Tour de Francia, “llegaron los nervios y las prisas. El querer hacerlo todo bien", el sacar el máximo rendimiento a una temporada que ya se había despedazado, “el presionarnos todos mucho para intentar hacerlo mejor nos hizo ir a contrapié".
Una temporada así, coinciden ambos, enseña mucho. Más que con las victorias. “Aprendes que cuando las cosas no salen tan bien, la convivencia no es tan buena, que hay más roces con todos, y saber afrontar eso y darle la vuelta vale mucho", cuenta Losada. “Teníamos tensión porque queríamos ganar pero somos amigos y sabemos lo que tenemos que hacer", prosigue Dani Moreno.
“A mi lo que me ha enseñado este año", continúa el madrileño, “es que ves que cuando las cosas salen mal, de repente desaparecen muchas personas que antes estaban, es una cosa fea de la vida y a la vez curioso".
Dani está convencido de que los resultados volverán de nuevo. Quién sabe si las personas también. “La gente puede decir que a Purito se le ha acabado la chispa pero ha sido un año de mala suerte. No creo que se nos haya pasado el arroz, Purito es el mismo de siempre".
“Nunca se sabe pero a lo mejor los mejores años están ya atrás", sopesa Losada. El magnífico 2012 luchando por el Giro y la Vuelta, el inolvidable 2013 con su podium en el Tour y el ya para la historia Mundial de Florencia. “Como fueron tan buenos siempre tiendes a pensar que a lo mejor ya no se van a volver a dar como aquellos porque los años pasan pero creo que es verlo. Esperar y verlo", refrenda el escalador catalán. “Pero hemos visto a gente de más edad ganando una grande y yo creo que por físico en el caso de Purito no será. Y mentalmente está igual que cuando tenía veinte años. Ganas le sobran".
Coincide con él Moreno: “Si eres profesional y un tío bueno como es Purito esto no se acaba en dos días. Lo que se te puede agotar es la mentalidad, pero si es la de un ganador, vas a estar delante siempre. La chispa y la explosividad no se le han apagado a Joaquín", avisa.
En el camino de regreso a la victoria, Losada tiene clara la estrategia. “Tenemos que seguir en la línea en la que estábamos estos años, de hacer las cosas bien pero con tranquilidad. Así es como salen las cosas. El año pasado por presionarnos y limar lo que no se puede nos salieron las cosas peor". Sus aspiraciones personales pasan por “estar al nivel de otros años. El año pasado tampoco fue bueno para mí, se me juntaron cosas en casa y varias cosas que hicieron que todo no marchara adecuadamente pero ahora está todo bien, más tranquilo y con ganas", revela Losada. Dani Moreno, por su parte también las tiene claras: “ser el último hombre en montaña que acompañe a Purito, estar cerca de él y si puedo tener mi oportunidad, aprovecharla, porque nos entendemos muy bien en los finales de carrera. Me gustaría hacer una buena Flecha Valona, es mi carrera favorita".
Losada ha pasado buena parte del invierno con Purito en Andorra y ha sido testigo de ese reseteo que el líder catalán ha dado a su mente. “Lo veo muy tranquilo y es lo que ha trasmitido al grupo. Creo que es lo que nos hacía falta, porque es lo que nos hace ir bien". Dani Moreno, en cambio, solo lo ha visto en la concentración del Katusha el pasado mes de diciembre pues, una vez terminada la temporada puso rumbo a Argentina, el hogar de su mujer, pero han estado en comunicación permanente a través del teléfono. “He notado que está haciendo las cosas bien y sin volverse loco", cuenta.
Con él se reencontrará en el Tour de Omán, “y de allí nos iremos juntos al Teide para la primera concentración en altura", donde ya les estarán esperando el propio Losada, Vicioso, Caruso y Paolini, antes de correr la Tirreno-Adriático. Después, Purito será el único que baje del volcán para correr la Volta a Catalunya, una carrera donde el Katusha se ha decidido por llevar a toda la armada que correrá el Giro de Italia, a excepción de Purito, por ser el dorsal 1 y correr en casa. En abril, los caminos del líder y sus gregarios volverán a separarse, pues Dani Moreno y Losada correrán la Vuelta al País Vasco mientras Joaquín permanecerá en Tenerife antes de viajar todos a las clásicas de las Ardenas.
Ésa será la primera prueba de fuego, “la Lieja", especifica Losada, “salir de allí con una victoria nos daría mucha moral para afrontar el Tour con la motivación alta". Un Tour que “nos lo han hecho a medida, para que él pueda ganarlo. Tiene que ser nuestra carrera", afirma el catalán.
Ni a Losada ni a Dani Moreno les preocupa la entidad de los rivales a los que se tendrá que enfrentar Purito. Ni Contador, ni Froome, ni Quintana ni Nibali. “Mejor que estén todos, cuantos más rivales mejor, más bonito", responde Dani. “Al final todo el mundo llega bien a las carreras, y si no esta Froome estará otro. Siempre hay alguien que está en una forma estratosférica", razona. “La carretera pondrá a cada uno en su sitio", añade Losada. “Si Purito recupera el nivel que tiene, subiendo estará con ellos o incluso irá mejor. Lo veo capacitado para ganar el Tour".
Su arma será hacer dinamita la carrera. “Es el corredor más explosivo del mundo, en subidas cortas no hay nadie que lo iguale y eso irá a su favor", opina Losada. Y tendrá un equipo a su alrededor completamente entregado, “porque come y deja comer", dice Dani Moreno. “Deja que los demás compañeros hagamos resultados y eso hace que tengamos un grupo tan bueno. No lo quiere todo para él. Todos tenemos nuestra oportunidad a su lado y eso hace que cuando lleguemos al Tour todos nos sacrificaremos por él"