En las rampas de Prato Nevoso vimos flaquear por primera vez al líder Simon Yates. En ninguna otra jornada del Giro, el británico -sólido líder- había dado muestras de debilidad, pero ayer no pudo seguir el ritmo de sus más directos (Dumoulin, Pozzovivo y Chris Froome) y perdió 28” con ellos, justo la mitad de la ventaja que tenía con Dumoulin, su mayor amenaza para consolidar la maglia rosa.
Esta imagen de un Simon Yates fatigado añade más emoción aún a las dos etapas alpinas de hoy y mañana, a priori más decisivas que las de ayer, al encadenar varios puertos de entidad. Las dos son durísimas, pero para casi todos la de hoy viernes (Venaria Reale-Bardonecchia, de 184 km) es la etapa reina, con 90 kilómetros finales temibles, que comienzan con la ascensión al Colle delle Finestre, Cima Coppi y el puerto más duro del Giro, con sus nueve kilómetros finales de sterrato. En sus rampas, Mikel Landa puso contra las cuerdas a Alberto Contador la última vez que se subió, en 2015.
Antes de entrar a analizar las dos etapas, recordemos como marcha la clasificación general en sus primeros puestos.
VIERNES 25. Etapa 19: Venaria Reale-Bardonecchia (184 km)
Para muchos, la etapa reina del Giro, con la ascensión a tres duros puertos –entre ellos el temible Finestre, Cima Coppi de la carrera (se corona a 2.178 metros de altura)-, antes de acometer la ascensión final a Bardonecchia, de 7,2 km al 9,1% de media.
Los ciclistas subirán primero el largo y tendido Colle de Lys en el km 48 (de 2ª cat, 13,8 km al 4,2%), y tras el descenso y un tramo llano de unos 30 km afrontarán el puerto más duro del Giro: el Colle delle Finestre, 18,5 km al 9,2% de media y rampas de hasta el 14%.
Su pendiente es muy constante, estando sus 9 primeros km pavimentados, mientras que los siguientes 9 son caminos de tierra (sterrato) hasta la cumbre. Un puerto temible que se corona a 73 km de meta, y que puede dar lugar a estrategias agresivas y ataques lejanos que dinamiten la carrera.
El Colle delle Finestre se ha subido en tres ocasiones en el Giro de Italia, aunque nunca ha sido final de etapa (en todos los casos la etapa finalizó en el cercano Sestrieres). En 2005 coronó primero este puerto el venezolano José Rujano, en 2011 Vasil Kiriyienka, y en 2015 Mikel Landa, en una etapa en la que puso contra las cuerdas al líder, y ganador final, Alberto Contador.
La bajada de Finestre termina en la base de Sestrieres, donde los ciclistas comenzarán una ascensión de 16,2 km al 3,8%. Tras coronarlo, una larga bajada hasta Ouxl, donde comenzará la ascensión final a Bardonecchia, un puerto de 7,2 km al 9,1% de media con rampas de hasta el 14% para culminar una jornada temible. A destacar que a 6 km de meta los ciclistas atravesarán un estrecho y espectacular pasaje en Maillaures.
SÁBADO 26. Etapa 20: Susa-Cervinia (214 km)
Última etapa de los Alpes, de nuevo con tres puertos de entidad encadenados (los tres de 1ª o categoría especial) y la dureza añadida de su largo kilometraje: 214 km. La jornada ofrece casi 4000 metros de desnivel acumulado, concentrados casi en su totalidad en los últimos 90 km.
Tras 130 km prácticamente llanos los ciclistas afrontarán la primera subida del día, el Col de Tsecore, de 16,5 km al 7,7%, con largos tramos de más del 12% en sus últimos 4 km. Un rápido descenso llevará a los ciclistas a la base del no menos duro Col de St. Pantaleón, 16,5 km al 7,2%, que enlaza, casi sin solución de continuidad, con la ascensión final a Cervinia, muy larga pero mucho más tendida (19 km al 5,3% de media), con carretera ancha y en buen estado, última oportunidad para quien aún busque un último vuelco en la clasificación general. En los últimos 6 km de esta ascensión los ciclistas atravesarán dos galerías iluminadas.
Altimetría Col de Saint Pantaleon