Impresionante el trabajo realizado en sus tubos, combinando absorción y rigidez con un magnífico resultado. Su eje de pedalier BSA -a rosca- es sinónimo de sencillez sin perder fiabilidad y sus roscas para guardabarros aumentan su versatilidad.
Las Avant son las bicicletas de gran fondo de Orbea. Modelos versátiles con las que poder pasar sin problemas largas jornadas sobre el sillín, rodando por cualquier tipo de firme, al ser algo más cómodas y estables que otros modelos de la marca, pero sin perder el carácter deportivo de estos. Según Orbea, bicis para días épicos por carreteras serpenteantes en mal estado y quién sabe qué más. Con ganas de poner a prueba esta versatilidad, salimos a rodar por las épicas carreteras de nuestro entorno, no sin antes cambiar la potencia por una más larga y angulada para lograr una posición como la que llevamos en nuestra bici habitual, obteniendo un reparto de pesos ideal para poder pasar muchas horas sin molestia alguna o fatiga. Primera muestra de su versatilidad.
Rodando, lo que más llama la atención es su suavidad de marcha, muy superior a la de modelos de carbono que la superan en precio. Aunque suene a tópico, como rodar sobre una alfombra, sobre todo en el tren trasero, lo que permite circular por firmes malos cómodamente, tal y como afirma Orbea. El principal responsable es su cuadro y sus estudiadas y preciosas formas, fundamentalmente las de sus finísimas vainas y tirantes que se aplanan y achatan para conseguir tal grado de confort.
Su tubo horizontal, muy plano y con una curiosa curva cerca del tubo del sillín, también ayuda. Lástima que la horquilla no acompañe hasta tal punto de confort. Quizá pueda ser debido a su cuello de aluminio, que aumenta su peso. Toda salida épica tiene sus momentos de tensión para los que necesitaremos rigidez.
En este caso hay de sobra a nivel de pedalier y dirección para poder esprintar, ponerte de pie y rodar fuerte sin problemas. El último ingrediente de las salidas épicas son las bajadas reviradas. Aquí su geometría de ángulos deportivos y su amplitud entre ejes la convierten en una gran bajadora que aporta seguridad sin perder agilidad. Diversión sin miedo.
Aderezado con…
Respecto al montaje, incluye un grupo y unos componentes que respetan la polivalencia de la que hace gala. Cambios fiables y efectivos, aunque por desgracia resultan duros de accionar al llevar funda a lo largo de todo el cable -de marca diferente a Shimano-; rodar fino gracias a sus cómodos y adherentes neumáticos y a sus sólidas ruedas, que además de suaves en el giro y bien rematadas, cuentan con una buena pista de frenado que ayuda a detener la bici sin problema en cualquier situación a pesar de sus chiclosos frenos; tija de carbono y sillín, muy cómodos y que ponen su granito de arena en cuanto a confort; y una potencia y manillar que aportan rigidez y ergonomía. Resumiendo, un conjunto muy versátil que se desenvuelve de maravilla en llano, por posición y rigidez, y en bajadas por comportamiento; y de no ser por el peso ni las subidas ni los cambios de ritmos se le atragantarían. Pero donde destaca es en el confort de marcha, muy logrado, tanto que invita a convertir en épica, por larga o por intensa, cualquier salida.
Lo mejor
- Rendimiento equilibrado.
- Capacidad de absorción.
- Estética atractiva.
Lo peor
- El peso le resta dinamismo.
- Cambios duros.
Ficha Técnica
Cuadro/Horquilla: Orbea Avant Hydro. Alumnio hidroformado y triple conificado / Horquilla de carbono 1-1/8", cuello de aluminio.
Grupo: Shimano 105, 11-28 (11v), bielas FSA Gossamer 34/50, frenos Orbea OC-II.
Ruedas: Vision Team 25
Componentes: Orbea OC-II, sillín Prologo K3 STN.
Peso: 9,470 kg
Precio: 1.199 €
