Tras compartir equipo tres años en Euskaltel Euskadi (2011-2013) y otros tres en Movistar (2014-2016), los hermanos Izagirre vuelven a compartir maillot en este 2018, esta vez el del Bahrain Mérida que ya vistió Ion la pasada temporada. El pequeño de los Izagirre, que regresa a la competición, habla de su proceso de recuperación tas su grave caída en el Tour de Francia, mientras que Gorka muestra su satisfacción por compartir de nuevo equipo junto a su hermano. Ambos inauguran temporada esta próxima semana en Australia, en el Tour Down Under.
- ¿Tenías miedo de no volver a ser el mismo?
Ion: Dudas al principio. Luego sí que cambia el chip y ves que vuelves a ser igual. La mentalidad que tengas a la hora de recuperar influye mucho.
- ¿En qué momento te cambió el chip?
Ion: Después de la operación. Cuando vi que todo iba más rápido de lo previsto. La recuperación, ponerme de pie… después de un golpe así… nunca me habían operado antes, no sabía cómo iba a salir ni cómo funcionaba la rehabilitación ni el post operatorio; si estaría en la cama una semana y luego con corsé. Todo eso lo pensaba y además vi lo que le había pasado a Castroviejo que estuvo así. Pero al día siguiente ya me puse de pie. El fisio del hospital me dio caña diciéndome que le diera caña al cuerpo, porque la cama no me favorece. Me dijo que me había saltado un mes así (chasquea los dedos), que quizá todo iba a ir más rápido de lo previsto. Ese echar para adelante me hizo ver que iba a volver a ser el de antes.
- ¿Cuándo te subiste por primera vez a la bici?
Ion: El 28 de agosto. Hice rehabilitación con el equipo de Mikel Sánchez y su hija Itsaso, en Vitoria, donde la hizo también Joseba Beloki cuando se cayó en el Tour. Me lo propuso él, me dijo que era un buen grupo. Allí sí que estuve en una bici estática. Pero el primer día fue el 28 de agosto. De ese día no me voy a olvidar nunca, después de todo lo que pasas y verte ahí encima de nuevo, te da mucha moral.
- ¿Y tú, Gorka, como lo viviste?
Gorka: No estuve mucho con él. Tenía carreras, y hasta que no terminé la temporada, en los mundiales no le vi mucho.
Ion: Hablar sí. Y le enviaba fotos y vídeos.
- ¿Te asustó verlo así?
Gorka: Sí. Al principio cuando se cayó no pensaba que fuese para retirarse ni tan grave. Pero cuando empezaron a decir que era de las vértebras ya te preocupas. Pensé que le iba a costar muchísimo más recuperarse, pero del hospital salió andando, decía que estaba bastante bien. Yo todo el rato le decía que anduviese con cuidado y tranquilo. Cada vez que hablaba con él me contaba un nuevo progreso; que había empezado a andar, que había comenzado la rehabilitación…
Ion: Sí, y él siempre me decía que anduviese tranquilo y con cuidado, que era una lesión grave y que no se curaba de la noche a la mañana.
- ¿Le hacías caso?
Ion: Quería ir para adelante pero también sabía que tenía una cosa seria. El equipo que tenía detrás, en la rehabilitación, también me paraba los pies. Por mi hubiera terminado la temporada corriendo.
- Cuándo te subiste a la bici por primera vez, ¿sufriste, tenías miedo?
Ion: No. Iba controlando la espalda, a ver si se cargaba o me molestaba. No fue nada difícil. Hice una horita, tranquilo. No iba ni a veinte por hora. Me fui probando, a ponerme de pie y ves que todo va bien. Eso tranquiliza.
- ¿Dolor no has tenido?
Ion: Nunca. Molestias sí y se me ha cargado la zona lumbar pero dolor como tal no. Tenía dudas con la cabra pero en la concentración de Croacia la cogimos y estuvimos entrenando con ella. No la había cogido desde la caída del Tour, y no me di ni cuenta, ni lo pensaba la verdad. Fue como otro entrenamiento más, como si no tuviese la placa. Luego pensaba que ni me había molestada. En casa también he trabajado mucho el fortalecimiento de la espalda: estiramientos, flexibilidad. Pensé que iba a tener mucha limitación y no ha sido así.
- ¿Tienes ganas de debutar?
Ion: Como un neoprofesional. Pero también tengo dudas, porque una cosa es el entrenamiento y otra la competición, que es más exigente y hay más estrés y también riesgo. Ya veremos cómo me veo en el pelotón, en los sprints, en las bajadas y cuando llueva. Tengo que ver hasta qué punto mantengo la confianza. El primer test será el Tour Down Under.
Ion Izagirre
Ion Izagirre
Gorka Izagirre
- ¿Cómo va a ser vuestro calendario?
Gorka: Casi igual. Australia y luego yo seguramente haré Omán, Ion no. Después París-Niza y País Vasco y Dauphine.
Ion: Y yo haré Abu Dhabi en vez de Omán, las clásicas de las Ardenas y luego Romandía.
- ¿Y los dos correréis el Tour?
Ion: Sí, estamos los dos en el grupo. Haríamos un descanso después de Romandía y después una concentración en el Teide para el Tour. En principio está previsto que corramos el Tour y la Vuelta.
- Es decir, que espacio para que seáis jefes de filas, habrá poco
Ion: No, pero nunca me ha obsesionado eso. La prensa siempre me ha preguntado por ello, y cuando vine aquí desde Movistar parecía que había sido para liderar al equipo en una grande. Así fui al Tour. Al principio me daba un poco de respeto, luego me motivó, iba con ganas pero no sé, son carreras de muchos días y nunca he hecho una carrera de tres semanas como líder. El año pasado lo iba a hacer y no pude. Es una incógnita. No quiero arriesgar tampoco. Prefiero preparar bien las vueltas de una semana, y si hay que echar un cable a Vincenzo Nibali lo haré.
- ¿No te llama ser jefe de filas en una grande?
Ion: En la Vuelta sí que me han propuesto hacerla como líder. Nunca la he corrido pero me dicen que no hay tanta tensión. Hay mucho nivel pero la afrontas de otra manera. Me lo han planteado, pero aún queda mucho. Está muy lejos.
- ¿Lo ves como demasiado grande?
Ion: No grande, pero como no lo he hecho nunca todavía tampoco me lo planteo. No me importaría.
- ¿Y esa ambición no la tienes?
Ion: Si voy a la Vuelta como líder lo haré con mucha ambición y toda la ilusión del mundo, eso está claro. Como este año he ido al Tour. Pero siempre he dicho que en las vueltas de una semana es donde me veo cómodo, donde me veo bien. Sé que pasan los años y vas conociendo las carreras más y casi siempre los puertos y los recorridos son parecidos, igual que los rivales. Todo es experiencia.
- ¿Qué te aporta la llegada de tu hermano?
Ion: Que si antes estaba bien, ahora súper bien. Siempre he dicho que tenerlo a mi lado es una confianza extra. Somos profesionales y hacemos las cosas bien, pero la confianza que me trasmite él no me la trasmite nadie. A la hora de afrontar las carreras, para tomar una decisión en un momento clave que quizá los directores no ven o no saben, muchas veces somos nosotros los que tenemos que tomarlas. A mi me cuesta más algunas veces y Gorka, cuando coge la batuta lo hace bien. Me da tranquilidad. Lo que me falta a mi lo tiene él. Y lo que yo tengo es lo que él no tiene. Nos complementamos bien.
- ¿Qué es lo que tienes tú que Ion no tenga?
Gorka: No sé (ríe)
Ion: ¡Dos hijos y yo solo uno!
Gorka: Carácter
- ¿Y cómo se adquiere ese carácter?
Gorka: Yo soy natural, no le doy muchas vueltas. Me sale así, viene con mi personalidad.
- ¿Ya te ha dicho Quintana lo mucho que te va a echar de menos?
Gorka: (se ríe) Ya me lo dijo, ya… Hemos vivido mucho juntos. Muchas carreras, muchas victoria, momentos buenos y malos. Hemos sido grandes compañeros. Ahora se separan nuestros caminos pero seguiremos siendo amigos siempre. Me echará de menos pero en todos los equipos hay altas y bajas todos los años. Conseguirá a otros corredores que hagan el trabajo que le hacía yo. Igual lo hacen mejor que yo, nunca se sabe. Tampoco hay que darle más importancia. He hecho unos años muy bonitos y fructíferos en Movistar. Ahora empieza para mí una nueva etapa aquí en el Bahrein, donde tenemos un grupo muy bueno. Siempre me ha gustado hacer las cosas bien.
Gorka Izagirre
- ¿Estaba destinado a suceder esto, que acabaras recalando aquí, junto a Ion?
Gorka: No. Hasta el último momento me costó tomar la decisión. En Movistar estaba muy bien valorado. Pero también quería abrirme un poco más al mundo, salir.
- ¿Qué te has encontrado de diferente en Bahrein-Merida?
Gorka: Cambia que ves que el mundo no solo somos nosotros. Hay corredores de muchas nacionalidades y me gusta porque conoces gente muy diferente, cada uno con su personalidad y su lengua. Es una forma de aprender en la vida, no solo en cuanto al ciclismo.
- ¿Y del Mundial qué opináis? ¿Os gustaría estar viendo lo duro que va a ser?
Ion: Claro. Sí, hombre, claro que me gustaría viendo el perfil que tiene. Se ve que será un mundial muy duro. Habrá que preguntarle a Mínguez a ver qué piensa. Ya veremos, falta mucho. A ver cómo llegamos y si no tenemos mala suerte como este año he tenido yo. Ni he pensado en eso, lo veo tan lejos…quiero ir paso a paso. Pero está claro que a mi me gustaría ir.
- ¿Pensáis en algún resultado en particular?
Ion: Ya no quiero resultados, lo que no quiero es mala suerte, ni tampoco buena. Es un topicazo, pero cuando estas así, solo estar bien es la ostia. Todo lo demás, si haces bien el trabajo y estás bien, llega.
Gorka: Por mi parte, dar otro pasito más. En resultados, lo que ha dicho Ion. No tener mala suerte. Sé que si estoy bien y no tengo ningún percance puedo estar delante.
- ¿En que se traduce ese ‘pasito’ más?
Gorka: En subir un poco más el nivel en todo, aunque es difícil. Siempre uno mismo intenta mejorar, aunque es muy difícil.
- ¿Ayudar a Nibali a ganar el Tour motiva?
Ion: Si tienes un líder como él que sigue demostrando que es uno de los mejores del mundo en carreras de tres semanas, está claro que sí.
- ¿Habéis hablado con él?
Gorka: Sí, en la concentración de Croacia. Decía que estaba contento de mi llegada. Además en el Tour hay una crono por equipos y el equipo que lleves va a tener un papel importante. Tendré que estar con él delante y esa presión también me motiva. Cada vuelta grande que corre, Nibali está en el podio. Es un seguro total.
- Ahora le puedes contar los secretos de Nairo a él
Gorka: No tiene muchos. Hoy en día todos se conocen muy bien.
- ¿Se te va a hacer raro, en el momento que estés en carrera, tirar para otro?
Gorka: Bueno, igual en la primera carrera en Australia más. Al ver a los antiguos compañeros y auxiliares y yo con otros colores, pero conforme pasen las carreras me acostumbraré.
