«Tenía que ser un poco grajo y jugar a romper la carrera»
Foto: Joseba Etxaburu
En pleno descenso de Arkale ha decidido lanzar su ataque, ¿no lo veías lejano y con el suelo demasiado mojado y peligroso para arriesgar?
Cuando atacó Pierrick Fedrigo supe que era el momento de arrancar y me fui con él hasta que, por detrás llegó Luis León Sánchez. Hemos conseguido eliminar a Fedrigo y marcharnos juntos. Ahí le he dicho a Luisle que, yendo con él, yo me conformaba con el segundo puesto en meta y que iba a colaborar para que llegáramos juntos, pero nos han cogido por detrás y la carrera ha vuelto a abrirse y aumentar las posibilidades con más candidatos al triunfo.
Con el posterior ataque de Kreuziger tampoco te lo has pensado
No, he intentado lanzar mis bazas jugando siempre a ganar. Sabía que tenía que ser un poco "grajo" y juguetear para romper la carrera. Me he aprovechado del trabajo de Kreuziger, porque cuando ha atacado he ido ha habido un momento de parón y entonces he visto que era mi momento.
¿Ha sido una victoria de fuerza o de inteligencia?
La verdad es que, más que por fuerza, me he aprovechado de las dudas que había en el grupo y por eso he atacado cuando Kreuziger se ha ido. He pensado "Que sea lo que Dios quiera". Todos se miraban y entonces he hecho mi apuesta, he jugado a ganar al escarceo porque detrás venían corredores como Pozzato y Valverde a los que les interesaba el sprint. Era la mía, he visto el momento y me he lanzado a por Kreuziger.
¿No se te ha pasado por la cabeza la imagen de Markus Burghardt, tu verdugo el año pasado en la etapa del Tour de Francia en la que te batió?
Si soy sincero, más que Burghardt, se me ha venido a la cabeza la imagen de Juanma Garate cuando perdió en este mismo sitio frente a Leonardo Bertagnolli en 2007. Garate es un gran amigo y recuerdo lo mucho que se lamentó por perder aquel día. He pensado sobre todo en él, para no reeditarlo más que en el momento del Tour del 2008.
¿Sirve este triunfo para quitar el mal sabor de boca que dejó el Tour de Francia al Quick Step?
Sí. El equipo salió muy tocado del Tour porque hicimos una mala carrera. Yo, personalmente tampoco me encontré como hubiera querido y al resto de compañeros tampoco nos salió un buen Tour, fue complicado porque estuvimos todos los días al contrapié, pero son unos grandes profesionales y aquí, tanto el equipo que venía de la ronda gala como Devolder, Cataldo... que no lo habían corrido, han venido con mucha motivación y han trabajado mucho. Traíamos un equipo para ganar y, en la bajada de Jaizkibel yo, por arriesgar me he caído y he llegado a pensar que todo el trabajo se iba al traste. Afortunadamente no ha tenido mayores consecuencias y he podido rematar ese trabajo. Por eso quiero dedicar esta victoria a todo mi equipo, tanto a los corredores como a los auxiliares
¿Es la mejor victoria de tu carrera?
Sin duda. Este día va a ser inolvidable, muy especial y que nunca se me va a borrar de las retinas. Soy un corredor del montón, con pocas oportunidades para brillar, pero cuando las tengo las sé aprovechar.
¿Este triunfo es la confirmación de las aptitudes que atesoras para carreras de un día?
Son las carreras que me gustan, las grandes clásicas especialmente del mes de abril y donde el equipo debe rendir al máximo. Tuve la suerte de compartir equipo con Paolo Bettini, del que aprendí muchísimo y que espero que me sirva para el futuro. Éste año llegué a