Elia Viviani ha rozado la victoria en las dos primeras etapas de la Vuelta a San Juan. Dos sprints y dos segundos puestos. Siempre viendo el mismo maillot adelantarse a él, el del Quick Step. En la primera etapa su verdugo fue Fernando Gaviria y en la segunda, Tom Boonen. Pero el italiano no desespera y ve el vaso medio lleno: “Esto también significa que estoy bien y eso me hace feliz porque estoy empezando bien la temporada. Me falta solo ganar, pero lo seguiré intentando en los próximos días”.
Los dos segundos puestos, junto a las bonificaciones, han aupado a Viviani al liderato de la vuelta a San Juan por un solo segundo de ventaja respecto a Fernando Gaviria. Y el que fuera oro olímpico en Río de Janeiro no quiere que sea cosa de un día: “Quiero defenderlo”, confirma, “quiero hacer la crono a tope para mantener este maillot. Me puede ir bien, es corta y explosiva, con un recorrido que se me adapta. Tengo mucho respeto por este jersey que he cogido”.
Viviani se lamentaba de no haberse anticipado en el sprint para tratar de vencer a Boonen: “Quizá si lo hubiera hecho podría haber tenido más opciones, he fallado en eso pero no sé si habría podido con él”, confesaba. “Es difícil ganar al Quick Step. Tienen un treno que es capaz de ganar etapas en el Tour”.
Viviani contó que “la segunda etapa ha sido más intensa que la primera. De inicio ha habido un fuerte ritmo. La fuga no salía y había muchos intentos de ataques. La subida también la hemos hecho a tope, igual que la última vuelta y además, había tensión por lo que pudiera pasar con el viento”.