Ion Izagirre ha roto con el Movistar Team para incorporarse en 2017 a las filas del Bahrain-Merida, noticia que ya adelantó Ciclismo a Fondo el pasado 21 de septiembre y que por fin es oficial. El talentoso corredor vasco será una de las referencias de este nuevo proyecto procedente de Oriente Próximo que sediento de puntos World Tour para asegurarse una plaza en la máxima categoría del ciclismo mundial fijo como objetivo al pequeño de la saga de los Izagirre, que es 11º con 270 puntos. Una oferta irrechazable ha hecho posible el acuerdo y la escuadra de Unzué, comprensiva con la situación, ha dado vía libre al de Ormáiztegui para comprometerse las dos próximas campañas con en el Bahrain-Merida, donde contará con mayor libertad y será tras Vincenzo Nibali el corredor más relevante de una plantilla en la que también estarán los españoles Iván García Cortina, Javi Moreno y Jon Ander Insausti, primo de Izagirre y actual ciclista del Euskadi-Murias.
En 2016, Izagirre, de 27 años, ha completado su mejor curso como profesional con cinco victorias, tres en el WorldTour (etapa en Romandía, Suiza y el Tour de Francia) más el GP Miguel Indurain y el Campeonato de España contrarreloj; además fue 2º en la Volta Algarve y el Tour de Suiza, 3º en el Tour de Romandía, 5º en la París-Niza y 8º en la crono de los Juegos Olímpicos y en el Eneco Tour. En la siguiente entrevista, el propio corredor nos explica cómo se fraguó el fichaje y sus sensaciones tras haberse confirmado.
Ya es oficial tu fichaje por el Bahrain-Merida.
Y estoy contento por ello. Se trata de un nuevo equipo y una nueva oportunidad. La verdad es que ni me planteaba buscar equipo ni nada porque tenía contrato. Por el tema de los puntos buscaban un perfil como el mío y pudimos llegar a un acuerdo. Sí tenía claro que no quería terminar mal con el Movistar Team. Hablé con Eusebio (Unzué) en Lombardía. Me dijo que le daba pena que me marchara, aunque él sabía que era una buena oportunidad para mí, y que lo entendía. Tengo que agradecer esa postura en un mánager.
¿Era una oportunidad que no podías rechazar?
Sí, sí, eso es. No es fácil que en una carrera deportiva te suceda algo así y a mí me ha tocado justo ahora y tenía que aprovecharla. Además, han creído en mí y me dejaban llevar gente de confianza, eso es de agradecer, y he podido llevar a mi primo, Jon Ander (Insausti, del Euskadi-Murias). Esto me da una tranquilidad. Al ser una estructura totalmente nueva, otra cultura, otro idioma, quizá se haga un poco raro al principio, por eso intentaremos abrirnos y conocer un nuevo idioma, el italiano. Tener caras cercanas al lado, como Visconti o Javi Moreno, hará todo más fácil.
Tu hermano Gorka no estará a tu lado, sin embargo.
Sí, al final hay diferentes intereses. Él también tenía otro año de contrato y que nos marchásemos los dos no entraba en los planes de nadie. Es una pena porque me gustaría tenerlo conmigo, pero hay que entender a las diferentes partes.
Además de la oferta económica, ¿qué te ha seducido?
Sí, no solo es lo económico. Veía el interés de los mánagers del equipo, me llamaban, me decían que querían un corredor como yo sí o sí, porque este año han visto que soy un ciclista de vueltas de una semana que encajaba muy bien en su proyecto. Para mí es de agradecer ese interés y que valoren tu trabajo y te apoyen. Es gratificante. Veía que tenían ganas de verdad. Y viendo día a día los fichajes y las marcas que llegan se nota que va a ser un equipo potente. Esperemos ser una referencia año a año.
Tu objetivo seguirá siendo, por tanto, las vueltas de una semana tras tus buenos resultados de este año.
Sí, hablando con ellos esa es la intención; no querían cambiarme los objetivos que he tenido este año porque han visto que se me dan bien y que puedo hacer buenas cosas en ese tipo de carreras. Y yo tampoco quiero cambiar. Sin duda, esta ha sido mi mejor temporada deportivamente, a nivel de victorias y resultados. Las vueltas de tres semanas es algo muy complicado y hasta ahora tampoco he demostrado nada en las generales. Así que mejor ceñirnos a lo que se nos da bien y a lo que sabemos que podemos hacerlo bien que son las vueltas de una semana. Y el equipo así lo ve también.
Dejas atrás una etapa de tres años en el Movistar Team.
Han sido tres años en los que me ha ido muy bien, he estado como en casa y he crecido como ciclista cada año. Tengo que agradecer esa confianza. Me da un poco de pena si miro atrás, por los compañeros y el staff, pero la vida sigue y nadie sabe dónde vamos a terminar. El deporte es así y cada uno coge su camino.