La UCI ha emitido una notificación al Tinkoff-Saxo en la que comunica que abre un procedimiento disciplinario al checo Roman Kreuziger por anomalías en su pasaporte biológico entre los años 2011 y 2012. Por este motivo, el conjunto de Alberto Contador no podrá contar con Kreuziger en el próximo Tour de Francia donde estaba llamado a ser el último hombre del madrileño en la montaña.
Las irregularidades en el pasaporte biológico del quinto clasificado del pasado Tour de Francia se encontraron de marzo a agosto de 2011 y de abril hasta la finalización del Giro de Italia 2012. La UCI comunicó dicha circunstancia al corredor hace un año periodo en el que el Kreuziger ha estado presentando alegaciones que el Consejo de Expertos Antidopaje de la UCI no ha aceptado.
El corredor ha emitido un comunicado en el que defiende su inocencia y explica que su equipo ya estaba al corriente de esta investigación: “Comunique a mi equipo que estaba inmerso en este procedimiento y les informé de que no había usado ninguna sustancia prohibida o método prohibido. Estoy decidido a enfrentarme a cualquier tipo de explicación que vaya en contra de estos argumentos”.
Importante mazazo para el Tinkoff-Saxo que se ha visto obligado a llamar a menos de diez días para el comienzo del Tour a Rafal Majka para que asuma el papel que en principio estaba destinado al ciclista checo.