La UCI confirmó anoche mediante un comunicado oficial que el Astana mantiene su licencia World Tour a pesar de los cinco positivos que acumulo el conjunto kazajo y su filial durante el pasado año. Aun así, la licencia del Astana queda sujeta a un estricto seguimiento por parte del Instituto del Deporte y Ciencias de la Universidad de Lausana (ISSUL), encargado de auditar la responsabilidad de la directiva y el staff en los citados casos de dopaje. Cualquier incumplimiento de las condiciones establecidas podría suponer la reapertura del caso y la retirada definitiva de la licencia del conjunto kazajo.
Hasta ahora el Astana había estado compitiendo con una licencia World Tour provisional debido a los dos positivos por EPO de los hermanos Iglinsky, los tres casos de dopaje de su equipo filial y las dudas que despertó la auditoría que realizó el ISSUL.
Esta decisión asegura al Astana poder continuar compitiendo en las citas más importantes del calendario internacional por lo que Vincenzo Nibali podrá defender su triunfo en el Tour de Francia y Fabio Aru asaltar el maillot rosa en el Giro de Italia.