Cadel Evans no correrá las clásicas de las Árdenas. El 'aussie' tiene un hematoma en el hueso de su rodilla a consecuencia de una caída que se produjo entrenando y los médicos le han aconsejado una semana de reposo para recuperarse del todo. Así pues, el líder del BMC dejará huérfano el dorsal 1 en la Flecha Valona, tras su triunfo del pasado año, y tampoco disputará la Amstel Gold Race el próximo domingo ni la Lieja-Bastogne-Lieja.
Evans terminó sin contratiempos la Volta a Catalunya, su última vuelta por etapas disputada, pero unos días después, mientras entrenaba por los alrededores de su casa, en la localidad suiza de Mendrisio se cayó, provocándose un fuerte golpe en la rodilla derecha. Los médicos del BMC le han aconsejado parar, a pesar de que el golpe en un principio no parecía tener mayores consecuencias. Así "podrá recuperarse al máximo", informa el equipo médico del equipo. Y es que nada quiere dejar al azar la escuadra en la preparación de Cadel Evans para asaltar el Tour de Francia.
El que fuera campeón del mundo hace dos años regresará a la competición en el Tour de Romandía a finales de abril. "Es solo un pequeño contratiempo en el camino, esperaba estar listo para esta semana y me hubiera gustado que fuera así, para ayudar a Van Avermaet en la Amstel Gold Race", lamentó Evans. A largo plazo, opina el ciclista, "no será un problema?, este incidente. "Solo es un pequeño contratiempo", zanja.
