No pudo ganar, le faltaron cuatro segundos para conseguir su tercera París-Niza, pero Alberto Contador ha dormido esta noche con la tranquilidad del trabajo bien hecho después de haber propiciado una de las jornadas de ciclismo más espectaculares de los últimos tiempos. “Estoy contento con mi estado de forma a pesar de no haber conseguido ganar. Tengo que agradecer a mi equipo el trabajo que realizaron. Estoy seguro que todos los aficionados al ciclismo han disfrutado de una carrera espectacular y es por ellos por lo que hago esto”, en referencia a su valiente apuesta atacando a 60 km de la línea de meta.
“Nuestra estrategia fue perfectamente ejecutada. Metimos corredores en la fuga y cuando ataque, mis compañeros pudieron esperarme en la cima. Juagamos nuestras cartas de la manera que queríamos”, explicaba Alberto Contador que diseño junto al dirección del equipo Tinkoff una ambiciosa estrategía para intentar arrebatarle el maillot amarillo a Geraint Thomas, que gracias al extraordinario trabajo de su equipo pudo salvar la situación. “Sky tiene un equipo muy fuerte y nos cogieron justo antes del Col d’Eze. Rafal Majka estaba esperándome en el pelotón para endurecer la última subida. Atacamos de nuevo y dejamos el líder atrás aunque los diferentes intereses que había por detrás propiciaron que nuestra renta se acortara y solo pudiera sacar cinco segundos”.
A modo de conclusión, Alberto Contador resumía que “hemos dado lo mejor de nosotros mismos y hemos estado muy cerca, solo nos han faltado cuatro segundos. Hemos atacado con 60 kilómetros aún para el final y hemos llevado al líder al límite. Sabíamos que el margen era pequeño pero que sería muy difícil conseguir el objetivo ya que el Sky tenía un equipo muy fuerte”.