Foto: Rafa Gómez
Recién conquistadas las Lagunas de Neila en la quinta etapa, la última y majestuosa de la Vuelta a Burgos y con el cuarto puesto en la general de la misma carrera, Ezequiel Mosquera puso rumbo al macizo galaico-leonés de Peña Trevinca, en Fonte da Cova donde está concentrado desde el pasado martes para ultimar su puesta a punto mediante intensivas jornadas de entrenamientos en busca de asaltar con todas las garantías la próxima edición de la Vuelta a España, el gran objetivo de la temporada para el jefe de filas del Xacobeo-Galicia. La estancia de Mosquera en el techo montañoso de Orense se prolongará algo más de una semana. "Se trata de mantener la buena forma que tuve en la Vuelta a Burgos, allí me encontré muy bien y tengo margen para no forzar demasiado el cuerpo", comenta el propio Mosquera tras las primeras jornadas de preparación.
Ha sido una toma de contacto suave. "He realizado unas tres horas los dos primeros días y poco a poco iré cargándome con más intensidad, pero primero debo adaptar el cuerpo a la altura", añade. Mosquera es ya un experimentado en el terreno, puesto que en 2008 también acudió a Peña Trevinca para afinar el asalto a la Vuelta a España, preparación que le dio grandes resultados y le dejó en una buena condición que le llevó a concluir en cuarta posición en la general final de la ronda hispana. "Éste año ya sé a lo que vengo, aquí me toca desfogarme y fatigarme mucho. Sé lo que hay pero el año pasado me dio muy buenos resultados y espero que éste sea igual", comenta desde Peña Trevinca.
En esos entrenamientos, Ezequiel Mosquera estará en todo momento acompañado por los que serán cinco de sus lugartenientes en la próxima Vuelta a España: David García Dapena, Gustavo César Veloso, Gonzalo Rabuñal, Gustavo Domínguez y Eduard Vorganov. En su tercera jornada de altura, describe el propio Mosquera que "meteremos algún puerto e iremos subiendo la intensidad, pero de forma progresiva, sin forzar", subraya el líder gallego.
