"Habían cogido el coche y al ir a cerrar la puerta del garaje, no se sabe exactamente cómo, se ha quedado aprisionado entre la puerta del garaje y la de su propio coche". Así lo contaba, incrédulo y desde la distancia Eusebio Unzue, que a las diez y media de la mañana, veinte minutos después de que sucediera, ha recibido la llamada de Alfonso Galilea, otro de los directores del Movistar Team para comunicarle que Xavi Tondo había muerto.
El catalán se encontraba junto a Beñat Intxausti en un apartamento en Sierra Nevada, donde llevaba "ocho o diez días". Esta mañana, Xavi, al volante, y Beñat habían cogido el coche para bajar hasta Granada, donde habían quedado con Alejandro Valverde, José Joaquín Rojas, Barredo y Juanma Garate que estaban en la ciudad, donde iban a comenzar el entrenamiento. No se produjo.
Xavi salió del coche para abrir la puerta, de dos hojas del garaje y quedó atrapado. Mortal. "Comenzó a desangrarse en cuestión de segundos", explica Eusebio, "por lo que me ha contado Beñat Intxausti, que esta aún estado de shock". El vasco ha salido rápidamente del coche, "ha pasado al otro lado para adelantar el coche, poder liberarlo y hacerle los primeros auxilios, pero ha sido cuestión de diez segundos", proseguía Unzue.
"Lo que alcanzaba a contar es que ha sido un cúmulo de circunstancias". Eusebio Unzue desconocía si el coche estaba "perfectamente parado", pero "el caso es que se ha quedado atrapado entre la puerta del coche y la del garaje y le ha pillado el cuerpo".