Después de debutar a principios de febrero en el Giro e Cerdeña, Vincenzo Nibali prosigue su temporada y su camino hacia el Giro de Italia en la Tirreno-Adriático, el primer punto de referencia del año para el ciclista italiano en su preparación para la 'corsa rosa'. En el reto de conquistar la que sería su segunda grande tras haber vencido la última Vuelta a España, Nibali se encontrará una dura piedra en el camino, que no es otra que la de Alberto Contador. "Va a ser una bonita batalla", confiesa. De la que espera salir victorioso. "Si acabo segundo tras él, para mi sería como si hubiese ganado el Giro. Pero si le bato, mejor".
El test que Nibali está llevando acabó en la Tirreno-Adriático no está yendo del todo mal. En la cuarta etapa con final en Chieti del sábado fue octavo, entrando en meta en el primer grupo importante tras los hombres que lucharon por el triunfo entre los que se encontraba su compañero Ivan Basso, claramente en mejor estado que él. El varesino disfruta de su primer gran pico de forma del año, se lo puede permitir ahora, puesto que se tomará un descanso antes de empezar a preparar su asalto al Tour. Nibali, en cambio, se encamina al Giro de Italia, a ganarlo. "Por eso voy tranquilo, paso a paso, me queda mucho tiempo y tengo que ir cogiendo la forma progresivamente".
Correrá Milán-San Remo y Lieja
Después de la Tireno-Adriático, Nibali correrá la Milán-San Remo para marcharse directamente al Etna, donde pasará varios días concentrado. De ahí, partirá al Giro del Trentino y correrá también la Lieja-Bastogne-Lieja. Confiesa que no ha reconocido ninguna de las etapas de montaña de la 'corsa rosa' más allá de la ascensión al Etna y tampoco muestra intenciones de hacerlo. "Será como en la Vuelta, que la corrí sin saber nada del recorrido".
La participación Alberto Contador quita presión a Vincenzo Nibali, que hasta el momento era considerado el hombre a batir. Él, en cambio no lo cree así. "Me estaban colocando el cartel de máximo favorito pero con él en carrera las cosas cambian. Contador se convertirá en la rueda a seguir aunque no será el único, habrá muchos más rivales". En Italia corren ya ríos de tinta acerca de una posible la lucha cuerpo a cuerpo entre el italiano y el español. Nibali asegura no sentir todavía la carga mediática a las espaldas. "Yo estoy tranquilo, veremos lo que pasa", concluye.
