LOS 10 FAVORITOS |
LUIS LEÓN SÁNCHEZ
Estado de forma, experiencia, adaptación al recorrido, equipo. Muchos son los motivos para señalar a Luis León Sánchez como la gran referencia a batir en la París-Niza, pero sobre todo una: convicción. El ciclista murciano ha preparado a conciencia su acercamiento hasta la carrera francesa y viene señalándola en el calendario como su primer punto fuerte del año desde que fichó por el Rabobank. Ya sabe lo que es ganarla y frente a todo un Alberto Contador acosándole día sí y día también a base de ataques. Su condición física ha ido mejorando desde que debutó en Mallorca y ya en Algarve se le vio con los mejores tanto en la contrarreloj como en la subida a Malhao. Llega con los días justos de competición, ni corto ni pasado y tiene ante si un recorrido sinuoso, de continuos repechos y etapas rompepiernas con varias llegadas situadas después de vertiginosas bajadas. Son las jornadas en las que el León de Mula más brilla, como la quinta etapa y especialmente la última con el final en Niza. Y por si fuera poco, una contrarreloj no excesivamente larga donde Luisle se defiende bien y puede abrir hueco con respecto a rivales que no tengan sus mismas prestaciones. Oportunidad de oro para que de su primer zarpazo de la temporada
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SAMUEL SÁNCHEZ Iniciará en la París-Niza su camino de preparación seria hacia el Tour. En el camino, su parada más importante será la de ganar la Vuelta al País Vasco y para ello, la París-Niza le ofrece un escenario de lujo para examinar sus fuerzas por primera vez ante los que serán sus grandes rivales, tanto en julio como en la carrera vasca. De los favoritos, es el corredor que se presenta con menos días de competición, pues tan solo ha disputado la Vuelta a Andalucía, donde ya se dejó ver en el sprint de Antequera en el que solo Freire pudo batirlo. El parco kilometraje no debe ser un inconveniente para que el Campeón Olímpico se meta en la pelea por la general. Igual que a Luisle, para Samuel Sánchez el recorrido es idóneo: etapas de media montaña con bajadas cerca de la línea de meta donde en un mano a mano con cualquiera, él asturiano saldría a todas luces vencedor y una contrarreloj muy ajustada a sus características para recortar más tiempo a los rivales. Tendrá a su disposición a un equipo entregado en el que Gorka Izagirre y Juanjo Oroz serán sus escuderos. Primer test con vistas a País Vasco pero sin despreciar un caramelo tan preciado como el de la París-Niza. Fue cuarto el año pasado y esta capacitado para ganar. A excepción de Contador y Valverde, son los mismos rivales a los que se midió el pasado año por la general. Puede y debe aspirar a ganar |
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XAVIER TONDO En 2010 se coló en el top-20 merced a su memorable victoria en la penúltima etapa con final en Tourrettes sur Loup y no le debe pesar la carga que supone llevar el timón del Movistar en la primera gran prueba del año. Lo del Tour de San Luis fue un ensayo, no superado, pero un esbozo, un tanteo sobre el terreno al fin y al cabo. Es ahora cuando Tondo tiene que empezar a demostrar por qué se le pronostica, junto a David Arroyo como el jefe de filas de este mal-llamado "año de transición" del Movistar. Etapas como aquella que ganó tiene, y muchas Tondo para marcar diferencias o al menos dejar verse. Le falta al catalán alguna jornada con mayor dureza para gustarse más y por ello tendrá que aprovechar al máximo las etapas más exigentes, como la última. Pero para no tener que esperar hasta el final, Tondo es uno de los llamados a dejarse ver en la subida a Vernoux en Vivarais de la quinta etapa, puerto donde puede marcar diferencias para plantarse en línea de meta en solitario como ya lo hizo el pasado año. Un día después tendrá la contrarreloj, donde no debería salir mal parado. De ahí hasta el final, sus fuerzas lo dirán, pero tendrá junto a él a un equipo de gladiadores que supieron aguantar los envites de Alberto Contador en el 2009 para defender la victoria de Luis León Sánchez en la misma carrera |
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PETER SAGAN La amenaza más peligrosa y que más asusta, no solo a las múltiples y variadas opciones españolas, si no a todo aquel corredor que en la línea de salida se presente con la idea de luchar por el último maillot amarillo que se regalará en Niza. Ninguno sabe sus límites, ni siquiera él mismo, y eso es lo que más miedo da. Su asombrosa irrupción el año pasado tuvo lugar precisamente en ésta carrera. Ganó dos etapas, quedó segundo en otra -la que venció Xavier Tondo-, se llevó la clasificación por puntos y acabó 16º en la general. Esta temporada no se esconde y con las primeras victorias en el Giro de Cerdeña ya conquistadas anunció que su gran objetivo es luchar por ganar la París-Niza. Aptitudes no le faltan a la bestia eslovaca, que por el momento no se le ha visto acusar su juventud y allá donde va, triunfa. Tres etapas en la carrera italiana, además de la general son suficientes para revocar su perfecto estado de forma antes de encarar la París-Niza. La duda es saber si la presión podrá con él, pues será ahora cuando empiece a acaparar los focos de atención en las grandes citas, lo que le hará estar también muy vigilado. Las etapas se ajustan a sus características, quizá incluso en mayor medida que a los Frank Schleck, Levi Leipheimer o Xavi Tondo por su mayor capacidad para desenvolverse en las bajadas y arriesgar. Habrá que ver cómo resuelve la contrarreloj, pero en cualquier caso, tendrá terreno por delante tras los 27 kilómetros de la sexta etapa para machacar a los rivales a su gusto |
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TONY MARTIN Viene de demostrar en la Vuelta al
Algarve que ha comenzado la temporada con un estado de forma
espléndido. No solo ganó en Portugal por ser el mejor en la
contrarreloj final, también por aguantar con tesón en la ascensión
a Malhao, donde fue quinto. Afina acordes para el Tour de Francia y
qué mejor que hacerlo en París-Niza. Si bien es cierto que para
Tony Martin, el trazado no es tan apto como para Luis León o Samuel,
que con su potencia en los descensos pueden marcar la diferencia
respecto al alemán, pero el joven del HTC-Highroad deberá agarrar
el manillar con todas sus fuerzas, no temblar y buscar sus opciones
en etapas menos sinuosas a la par de aferrarse a su rendimiento en la
contrarreloj. Esa será la carta con la que Tony Martin apostará
fuerte. Los 27 kilómetros entre Rognes y Aix en Provence le vienen
como anillo al dedo. En un recorrido similar estuvo a punto de dar el
susto a Fabian Cancellara en la contrarreloj que abría la Vuelta a
Suiza. Formará trío con los talentos prodigiosos de Martin Velits y Teejay Van Garderen, a los que recurrirá cuando la situación de carrera se complique y que, en el caso de que Martin falle, se convertirá en los líderes del HTC |
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ROMAN KREUZIGER El punto caliente de su temporada, o al menos de los primeros seis meses es el Giro de Italia. En ello concentra Kreuziger todas sus energías y pensamientos pero el checo ya ha declarado que en París-Niza quiere verse delante. No tiene el potencial de Luis León o Samuel Sánchez para el tipo de etapas que la carrera presenta, le falta dureza a muchas jornadas, puertos más dificultosos y sobre todo, finales en alto para que Kreuziger se pueda ver luchando de tú a tú con los mejores pero si algo le caracteriza es su enorme capacidad para adaptarse a las circunstancias y su buena visión de carrera. Traza bien los descensos, en un supuesto duelo por victorias de etapa que vivan su desenlace en la parte final y cuenta con una buena intuición para colarse en escapadas peligrosas en las que puede convertirse en un hombre a marcar de cerca. La contrarreloj, corta y explosiva es un acicate motivador para Kreuziger, que podrá servirse de su trazado en ligera ascensión para establecer buenas marcas que puedan servirle para colarse en el podium. Será su primer ensayo grande como jefe de filas |
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FRANK SCHLECK
De los grandes nombres que se presentan como opciones a ganar la carrera, el de Frank Schleck es el que suena de forma más débil. No por potencial, pero sí por estado de forma, y sobre todo por adecuación al terreno. En lo que llevamos de temporada, no se han apreciado condiciones suficientes en el luxemburgués como para situarle en una lucha por el amarillo, más si cabe cuando el pasado reciente de los últimos años ha visto como el mayor de los hermanos, al igual que hará Andy en Tirreno-Adriático, acude a la París-Niza más con la intención de proseguir una lenta pero segura aproximación al Tour de Francia que con idea de disputar la general. El año pasado apenas se dejó ver pero completó el top-15, por lo que no sería de extrañar tenerle luchando por victorias de etapa, a pesar de que le faltan para sus piernas de escalador etapas con puertos más tendidos y finales en alto. En la contrarreloj le tocará sufrir, aunque de él se puede esperar todo, como en la Vuelta a Suiza del año pasado, en la que una inesperada buena prestación le otorgó el triunfo final. En cualquier caso, la forma física en la que estaba, y se espera estará en junio no es ni de lejos la misma que en marzo, será para Frank Schleck la París-Niza un excelente campo de pruebas, como para la mayoría, pero esta vez, sin Alberto Contador enfrente |
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LEVI LEIPHEIMER Sin hacer ruido, fiel a su estilo prudente pero siempre en la pelea. De una carrera que lleva disputada en la temporada, la Vuelta a Andalucía, ya ha arañado un podium. Y no intentó más, porque su compañero Markel Irizar acabó ganándola. Levi Leipheimer será junto a Andreas Kloden, la referencia a seguir del RadioShack. Corredor experimentado onde los haya en la París-Niza, siempre ha habido ciclistas superiores a él por combatividad, ataques o peleas desatadas, pero si algo lleva como sello el norteamericano es el aguante. Si llega bien posicionado antes de la contrarreloj se tornará en un corredor más que peligroso en las dos últimas etapas. No se ha dejado ver en sus anteriores participaciones con los favoritos, en parte, por verse supeditado a sus líderes, pero esta vez contará con Kloden como aliado de lujo y segundo espada en el caso de que las cosas no le salgan bien |
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VLADIMIR KARPETS Con Joaquim Rodríguez corriendo la Tirreno-Adriático y tomando al mismo tiempo la medida a los que serán sus rivales italianos en el Giro, el Katusha se pondrá a la entera disposición de Vladimir Karpets durante la París-Niza. La pasada temporada empezó más tarde que la presente, pues no debutó hasta la Volta a Catalunya, pero hace dos años, sin 'Purito' en el Katusha ya corrió París-Niza con un discreto 29º puesto en la general. Forma parte de ese grupo de corredores a los que les faltan puertos más largos y duros para correr pensando en la general, por lo que su objetivo no irá más allá de ir cogiendo el tono de cara al Tour de Francia en el que, también sin la presencia de 'Purito', será el jefe de filas del equipo ruso |
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BRADLEY WIGGINS Al igual que a Frank Schleck, no es precisamente el recorrido más adaptado para ver a un gran Bradley Wiggins, pero el inglés tiene como ventaja su buena condición frente a las etapas contra el reloj. Wiggins llega a París-Niza solo con el Tour de Qatar en las piernas. El contraste de temperaturas -la carrera francesa no suele librarse de las lluvias y sobre todo el frío- pueden hacerle mella aunque tiempo ha tenido desde mediados de febrero como para aclimatarse. Wiggins, también como el luxemburgués del Leopard Trek no llega con la intención de adjudicarse la victoria en esta carrera. Es de los que no les importa sacrificar una prueba de la entidad de París-Niza por estar en condiciones óptimas, más fresco y relajado en el Tour de Francia, aunque eso le haga pasar desapercibido en citas como esta. Aún así, su sola presencia en una escapada o sus ataques pueden poner en jaque al resto de favoritos. La contrarreloj de la sexta etapa es su mejor arma |
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