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"En esa última curva había que estar bien colocado, era muy peligrosa y salir bien de ella significaba tener mucho ganado", analiza. "Yo iba detrás de Bennati", la referencia en los últimos kilómetros, más después de ver el intenso trabajo del Liquigas al completo, líderes incluidos, para llevar a su velocista en volandas hasta el sprint. Vincenzo Nibali y Franco Pellizotti, los dos hombres fuertes del equipo de Roberto Amadio también se sacrificaron a favor de Bennati, especialmente en la ascensión a Vico, un repecho situado a doce kilómetros de la llegada y por el que después el pelotón ha pasado en cuatro ocasiones más. Con una ha sido suficiente para eliminar a Mark Cavendish. En el primer paso, el inglés se ha vuelto a quedar descolgado y no ha sido capaz de contactar con el grupo cabecero, auto-eliminándose así para luchar por la victoria.
Cruzado esta el "hombre de Man" en este inicio de temporada. Desconocido. Fue el único de los velocistas que no soportaron el empeño de Pellizotti por reventar la carrera. Como el rubio, también probó a romper piernas Alan Pérez. El navarro estuvo escapado desde el inicio de la jornada junto a Mikhail Ignatiev, Diego Caccia y Marangoni, pero con el súbito cambio de ritmo de los hombres del Liquigas, pronto fueron eliminados. De ese trabajo se aprovechó Tom Boonen. Atento como nunca, tomó la rueda de los hombres de verde para lanzar poco después se sprint. Nadie pudo hacerle frente. Sonata en solitario. Paul Maertens fue segundo y Bennati tercero. Rojas volvió a quedarse a las puertas, "pero lo importante es que las piernas responden, que tengo buenas sensaciones", asegura.
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