Foto: Rafa Gómez
La gran Muralla china se construyó en el siglo III a.C para proteger al gigante asiático de las tropas enemigas, los nómadas Xiongnu de Mongolia y Manchuria. Impenetrable. Supera los 7.000 kilómetros de largo y, dicen, es la única construcción humana visible desde el espacio. Por eso la selección española quiere alzarse en ella al olimpo. Para ser vistos desde el cielo. Estrellas. Los de Paco Antequera son los cinco fantásticos. Un tricampeón mundial. Dos clasicómanos y dos ganadores del Tour de Francia. Dream Tream. La rojigualda es, junto a la italiana, las dos grandes selecciones que acaparan todas las apuestas a la victoria en la prueba olímpica de ruta que se disputará mañana, de madrugada, hora española.
A todo hay que ponerle acento castellano. Está de moda. Freire, Valverde, Samuel Sánchez, Contador y Carlos Sastre quieren dejar el listón alto. O mantenerlo. Los cinco llegan en un gran estado de forma. Alejandro Valverde se impuso la semana pasada en
La de Samuel Sánchez será la tercera de las inagotables bazas de la selección española. El asturiano se desenvuelve a la perfección en pruebas de un día y, al igual que Valverde también en San Sebastián demostró que su condición no ha bajado tras disputar el Tour de Francia. Mientras tanto, Alberto Contador, será el hombre importante en la dura subida que el recorrido tiene reservada. Será una buena opción si la carrera pone en liza a varios hombres en una escapada larga y podrá intentarlo en las rampas de la ascensión. Por su parte, Carlos Sastre hará las labores de equipo para el resto de sus compañeros. El abulense, que apenas ha descansado desde su victoria en el Tour de Francia es quizá el hombre que llega en peor estado de forma, pero cuenta con un gran fondo, lo que, para el exigente trazado puede ser una gran ventaja.
Duro recorrido
Ése será el gran escollo de los españoles. El durísimo recorrido de
Desde el suelo intentarán los españoles derribarla. En busca del oro. De la conquista de la tierra prohibida. Para ello deberán enfrentarse a los nómadas. Pero no contra los Xiongnu, como los antiguos emperadores chinos. La guerra de la infantería española será, especialmente, frente a una aguerrida armada italiana que buscará renovar los votos del emperador olímpico Paolo Bettini. Marzio Bruseghin, Vincenzo Nibali, Franco Pellizotti y Davide Rebellin completan una selección alpina que no llega en su mejor momento pero que siempre supone una amenaza para el resto de contrincantes.
En la lucha por las medallas tampoco habrá que olvidarse de la potente selección luxemburguesa que, a pesar de contar con tan sólo tres corredores, los hermanos Schleck y Kim Kirchen es gran candidata al triunfo. Rusia, con Menchov, Kolobnev y Karpets, Estados Unidos con Hincapie y Leipheimer o Alemania con Jens Voigt, Stefan Schumacher y Fabian Wegmann son firmes opciones a la victoria, al igual que Fabian Cancellara, a pesar de que sea el único integrante de la selección suiza. Todos intentarán derribar