La víctima convertida en villano... Ése podría ser un posible título para esta historia surrealista que, lamentablemente, no pertenece al ámbito de la ficción, sino que ha sucedido recientemente en una carretera de Valencia...
Así lo relata en primera persona Héctor Beltrán, el ciclista que ha recibido una rocambolesca denuncia, con su correspondiente multa de 200 euros.
"Un domingo, hace ahora unas semanas, circulando por la carretera con un grupo de cuatro ciclistas, un coche nos pasó extremamente cerca (como tristemente tantas veces ocurre) y además nos pitó fuertemente.
Mi pareja, que iba en último lugar, bien fuera por el susto o miedo perdió el control de su bicicleta, cayó y quedó tendida en el suelo inconsciente. Al oír un golpe fuerte me giré viendo que ella estaba volando por los aires e intenté parar en seco, lo que me hizo también caer a mí de la bicicleta.
Me levanté corriendo y me apresuré a socorrerla mientras los otros dos compañeros llamaban a la ambulancia, ya que había sangre en la calzada que venía de la cabeza y ella no respondía. Varios coches pararon a ayudar hasta la llegada de la ambulancia y la Guardia Civil. Ella fue trasladada al hospital y, afortunadamente, no tenía ninguna lesión en la cabeza, pero sí una fractura en el codo que necesitó intervención y de la que aún está recuperándose.
Nosotros contamos lo ocurrido a la Guardia Civil y los compañeros abandonaron el lugar. Nuestras bicicletas las trasladó un ciclista que vivía cerca con una furgoneta.
Pasadas unas semanas he recibido una notificación de la DGT por la que se me denuncia por conducción negligente y una multa de 200€. Increíble cuanto poco.
No entiendo si esto es una caza de brujas, el acto de inhumanidad de una persona en concreto o simplemente un reflejo de la sociedad en que vivimos.
Un Saludo de… a este paso pronto… un ex-ciclista".
