Este miércoles pasado 28 de septiembre, La DGT nos envió, como representantes de Organizaciones Ciclistas, una documentación que se iba a manejar en una reunión por la que convocaron al Grupo de Trabajo de Seguridad Vial y Ciclistas para tener lugar el viernes 30. El objetivo consistía en la presentación formal del barómetro anual sobre la bicicleta y escenificar, con la presencia de todos, un mensaje conjunto de las distintas asociaciones y organismos participantes en el grupo de trabajo por el que se formulaba la necesidad de continuar con la labor ahora interrumpida por el final de legislatura. La convocatoria incidía en la existencia de un CONSENSO sobre los contenidos, especialmente el pretendidamente logrado en un documento de trabajo que recogía la futura reforma del Reglamento General de Circulación, no culminado por causa de la convocatoria de elecciones. Mi actitud fue la de, en todo momento, y desde hace bastantes meses, pedir el texto de la citada documentación a fin de poder conocer el proyecto final y valorar si se aceptaban nuestras propuestas más perentorias, documentación que no se nos trasladó sino hasta el miércoles 28 a última hora de la mañana.
Consecuencias. Personalmente no sabía al momento de la convocatoria de qué consenso se trataba si no teníamos el documento ni poder disponer del tiempo necesario para estudiarlo como se merece. El archivo que nos pasaron contenía el barómetro anual de la bicicleta cuyo texto se puede consultar aquí, junto con el “borrador" o documento de trabajo de la reforma del Reglamento General de Circulación, pudiendo también consultarlo pinchando este enlace.
Creo que todos vosotros tenéis derecho a acceder a esta documentación y conocerla, y por ello os la facilitamos y así podáis trasladarnos vuestras opiniones, dudas e inquietudes acerca del texto.
Como idea preliminar, hay cosas positivas en el documento de trabajo de la reforma del Reglamento General de Circulación que propusimos en su día y que recogió la DGT, pero desgraciadamente hay otras cuantas, no pocas, que no son aceptables. Tan poco asumibles que bajo ningún concepto lo consideraríamos como un documento de consenso.
Imaginaros la situación: nos citan para que con nuestra presencia avalemos una documentación de consenso cuando desconocemos el texto y una vez recibido prácticamente no hemos tenido tiempo de estudiarlo, detectando además puntos inaceptables.
Pero a más INRI, el vienes día 30, por motivos profesionales, me resultó imposible acudir a la citada reunión de presentación del barómetro anual de la bicicleta.
Nos gustaría que vosotros mismos echéis un vistazo a esta documentación, que, insisto, recoge indudablemente aspectos muy positivos. Pero sobre vuestras dudas y comentarios podemos ir saliendo al paso de las lagunas que contiene y los puntos especialmente negativos.
Reforma del Reglamento y Barómetro Ciclista
Este miércoles pasado 28 de septiembre, La DGT nos envió, como representantes de Organizaciones Ciclistas, una documentación que se iba a manejar en una reunión por la que convocaron al Grupo de Trabajo de Seguridad Vial y Ciclistas para tener lugar el viernes 30. El objetivo consistía en la presentación formal del barómetro anual sobre la bicicleta y escenificar, con la presencia de todos, un mensaje conjunto de las distintas asociaciones y organismos participantes en el grupo de trabajo por el que se formulaba la necesidad de continuar con la labor ahora interrumpida por el final de legislatura. La convocatoria incidía en la existencia de un CONSENSO sobre los contenidos, especialmente el pretendidamente logrado en un documento de trabajo que recogía la futura reforma del Reglamento General de Circulación, no culminado por causa de la convocatoria de elecciones. Mi actitud fue la de, en todo momento, y desde hace bastantes meses, pedir el texto de la citada documentación a fin de poder conocer el proyecto final y valorar si se aceptaban nuestras propuestas más perentorias, documentación que no se nos trasladó sino hasta el miércoles 28 a última hora de la mañana.