Muchos pensaron que se trataba de una más de sus excentricidades cuando en pleno Eneco Tour, Bradley Wiggins comentó a la prensa que estaba pensando en volver a la pista de cara a los juegos olimpicos de Río 2016. Con el paso de los días estas declaraciones parecen más solidas pues el vencedor del Tour de Francia 2012 afirmó en una entrevista concedida a The Times que quiere buscar su quinto oro en unas olimpiadas y que mejor manera de conseguirlo que volver a la pista donde ha sido triple campeón del mundo.
Para ello, el inglés planea abandonar el ciclismo de carretera una vez finalice la temporada 2014, dedicándose íntegramente a prepararse para la pista en 2015 y llegar así en las mejores condiciones a las olimpiadas de Río. "Lograr un quinto oro olímpico sería una buena manera de retirarme, así que voy a aguantar hasta los Juegos Olímpicos de Rio 2016. Pero ahora mismo, después de haber perdido tanto peso en los últimos años, no sería capaz de desarrollar la potencia suficiente para estar en la Persecución por equipos".
El ciclista inglés ha dejado entre ver en varias ocasiones que no está dispuesto a asumir los esfuerzos necesarios para volver a brillar en las grandes vueltas, asumiendo, además, que Chris Froome es una mejor baza para este tipo de pruebas que él. "No me importa admitir que Froome es mejor vueltómano que yo. Sube mucho mejor, hace grandes cronos, es más joven, no tiene hijos... Si quiere, tiene potencial para ganar cinco Tours. Eso significa que, para intentar ganar el Tour, debería abandonar el Sky, pero amo este equipo y no me voy a ir", argumentaba Wiggins.
Contento de haber conseguido todos los objetivos que se ha planteado en su carrera deportiva, parece que el año que viene será el último en que podamos disfrutar de Bradley Wiggins en las carreteras, el campeón inglés vuelve a sus ráices.
