Objeto de deseo desde la época de los cuadros de acero y después cuando el aluminio copaba el mercado, aún hoy, cuando el carbono copa todo, una máquina de titanio sigue teniendo ese sabor a Gran Reserva. Sólo para paladares refinados, los holandeses de Van Nicholas consiguen ir un paso más allá en el trabajo del titanio al aunar como nadie el sabor tradicional de un cuadro elaborado a mano con todo el mimo que sólo que el artesano que estampa su firma en cada creación es capaz de dar sus unas bicis con la más avanzada tecnología y las últimas soluciones en diseño.
Prueba de ello es el hidroformado de los tubos que permite optimizar las secciones para lograr una bici rígida lateralmente mientras se mantiene esa sensación exquisita al rodar que sólo el titanio es capaz de aportar. Esta Astraeus que los chicos de Van Nicholas prepararon para nuestros compañeros de la Revista Triatlón es la joya de la corona de cuantos modelos salen del taller de Van Nicholas.
Nos quedamos embelesados con detalles como el acabado pulido a mano de sus tubos, las elaboradas punteras, esas soldaduras precisas y regulares y sobre todo el tacto de un material tan fuerte como el acero a la par que liviano capaz de resistir como ninguno el paso del tiempo. Una máquina exclusiva en la que podremos personalizar hasta el mínimo detalle incluso hasta el extremo de prescindir de las tallas estándar que se nos ofrecen y optar por un cuadro hecho a medida.
Podéis disfrutar de todos los detalles en la galería de imágenes de esta inconfundible Van Nicholas
Precio: 8.849€
Más información en la página web de Van Nicholas.
