Tras el magnífico segundo puesto cosechado en el pasado Grande Trittico Lombardo, por detrás de su compañero Gorka Izagirre, Alex Aranburu volvió a dejar muestras de su calidad ayer en la Milán-San Remo, competición a la que acudía por primera vez y que superaba los 300 km de longitud.
El guipuzcoano estuvo siempre en cabeza y logró un meritorio 7º puesto, entrando en el grupo de los grandes favoritos (Matthews, Sagan, Nizzolo, Gilbert, Van Avermaet...), a 2'' de Wout van Aert (vencedor) y Julian Alaphilippe (segundo clasificado).
"Es mi debut en Milán-San Remo, no sabía qué esperar de mí mismo en una carrera tan larga, con un clima tan caluroso durante todo el día. Nunca había corrido más de 300 km hasta ahora, pero al final, puedo estar orgulloso de mi rendimiento", apuntó Aranburu.
"Ha sido un día muy duro, pero he conseguido quedarme en el primer grupo y hacer un buen sprint. Empecé un poco atrás, pero terminé en el Top10 y creo que es un resultado muy bueno para mí. Fue una experiencia muy valiosa para mí, me ayudará a seguir progresando en mi desarrollo como ciclista. Me gustaría volver a esta carrera en el futuro e intentar mejorar mi resultado. No es fácil ganar aquí, pero es un objetivo que vale la pena apuntar", concluyó el bravo corredor vasco.