Siempre con un talante bromista, distendido, el burgalés Carlos Barbero valoraba hace unos días su cuarta plaza en la quinta etapa del Tour de Guangxi a través de su activo perfil en una red social. “Esta temporada tenía todos los puestos del top10 menos la medalla de chocolate (4ª posición). Hasta China y en octubre hemos tenido que venir para hacer el pleno", escribía.
Una cuarta plaza inédita en el contexto de una temporada donde Barbero ha sido el corredor español que ha firmado más segundas plazas, hasta seis, y que le impulsaba al mismo nivel que el catalán Edu Prades (Euskad-Murias) y el murciano Luis León Sánchez (Astana), quien también se unió a la lista en la última prueba del WorldTour: los tres ciclistas que a lo largo del año ha acabado, al menos una vez, en todas las posiciones que conforman un top-ten ya fuera en etapas o en generales finales.
Cinco corredores, cerca del pleno
Un ‘pleno’ peculiar, acaso poco visible desde el punto de vista mediático, sin duda más amable con la parcela estadística de este deporte y que va más allá de las victorias del curso (Barbero y Sánchez, tres; Prades, dos). Alejandro Valverde, Jon Aberasturi, los hermanos Izagirre y Eduardo Sanz son los cinco corredores que han estado cerca de ingresar en ese club, pero se han quedado cerca.
Al campeón del mundo en Innsbruck le faltó hacer una sexta plaza en alguna prueba; a Aberasturi, la novena; a Ion se le resistió la victoria y a su hermano Gorka le faltó acabar octavo; en el caso de Sanz, la décima. Valverde, eso sí, como se destaca en la tabla elaborada por el blog Alpe d´Huez, fue el corredor español que concluyó sus competiciones dentro del top-diez en 2018: hasta en 39 ocasiones.
Pionero Prades
Fue Prades el primero en completar la lista. Ganador en el Tour de Noruega y el Tour de Turquía, el tarraconense acabó segundo en cinco ocasiones (tercera etapa de Castilla y León, general final del Tour de Yorkshire, últimas etapas del Tour de Noruega y el Tour de Luxemburgo y también en la jornada final de Turquía), fue tercero en cuatro (primera etapa y general final de Castilla y León; segunda etapa de Yorkshire y cuarta de Turquía) y cuarto en otras cinco ocasiones (Gran Premio Miguel Indurain, primera etapa de la Vuelta a Asturias, general final de Luxemburgo, segunda etapa del Tour de Limousin y séptima etapa de la Vuelta a España).
Prades acabó quinto en la última etapa de Yorkshire, finalizó sexto en el segundo trofeo de la Challenge de Mallorca y en la segunda etapa de la Vuelta al País Vasco; además, concluyó séptimo en la tercera etapa de la Vuelta a Asturias y en la penúltima etapa de la Vuelta a Luxemburgo. El nuevo corredor del Movistar Team firmó una octava plaza en la segunda etapa del Tour de Noruega, concluyó noveno en tres ocasiones ( primera y tercera etapa y general final del Tour de Limousin) y fue segundo en la décima etapa del Tour de Luxemburgo.
El curso de Barbero
Barbero, con esa cuarta plaza en la penúltima etapa del Tour de Guangxi, cerraba el círculo de un año donde obtuvo tres victorias (una etapa en la Vuelta a Castilla y León, otra en la Vuelta a Madrid y otra en la Vuelta a Burgos) y concretó hasta seis segundas posiciones (tercera etapa de la Vuelta a Andalucía, general final de la Vuelta a Castilla y León, segunda etapa de la Vuelta a Madrid, primera etapa de la Vuelta a Aragón, Circuito de Gexto y Gran Premio Bruno Beghelli).
Tercero en la última etapa de la Vuelta a Castilla y León y en la segunda de La Route d'Occitanie, Barbero también reúne cuatro quinta plazas durante el curso (Trofeo Palma, primera etapa de la La Route d'Occitanie, la prueba de fondo de los Campeonatos de España y la cuarta etapa del Tour de Gran Bretaña, donde además fue quinto con el Movistar en una crono por equipos).
Tanto en la primera etapa de la Vuelta a Andalucía como en la segunda de la Vuelta a Burgos finalizó sexto, siendo séptimo en la segunda etapa de la Vuelta a Aragón, octavo en la segunda jornada de la Vuelta a Castilla y León y en la Clásica de Almería, noveno en la última etapa del Tour Down Under y décimo en la segunda de la prueba australiana.
Luisle, pese a la lesión
En un año marcado por su caída, retirada y recuperación tras pasar por el quirófano en los albores del Tour de Francia, codo izquierdo y cuatro costillas fracturadas, el veterano Luis León Sánchez levantó los brazos en la Vuelta a Murcia, en la cuarta etapa del Tour de los Alpes y en la segunda del Tour de Almaty. El murciano ha sido segundo hasta en cinco ocasiones (segunda etapa de la Vuelta a la Comunitat Valenciana, donde además hizo segundo con el Astana al día siguiente en una crono por equipos y en la general final; segunda etapa de la Vuelta a Andalucía, tercera etapa de la París-Niza, primera etapa del Tour de los Alpes) y tercero en otras dos (cuarta etapa del Tour Down Under, cuarta etapa de la Vuelta a la Comunitat Valenciana).
El ciclista de Mula, que acabó sexto en la cuarta etapa del Tour Guangxi, donde completó esta peculiar clasificación, ha sido cuarto en cinco ocasiones (sexta etapa de la París-Niza, tercera etapa de La Route d'Occitanie, en los Campeonatos de España y en la primera etapa y la general final del Tour de Almaty) y quinto en tres (general final de la Vuelta a Andalucía, tercera etapa del Tour de los Alpes y general final de La Route d'Occitanie).
Séptimo en la crono de la París-Niza, noveno en la segunda etapa del Tour Down Under y décimo en la crono final de la Vuelta a Andalucía, Luis León Sánchez ha acabado octavo hasta en cuatro ocasiones: las generales finales del Tour de Guangxi, el Tour de los Alpes y el Tour Down Under; y la cuarta etapa de la Vuelta a Andalucía).