Jonas Vingegaard compareció después de la etapa ante los medios de comunicación un día más como líder de la Vuelta. Superadas dos de las etapas clave de la carrera, el temido paso por Asturias con el Angliru, donde le venció Joao Almeida y la Farrapona, con el triunfo de Marc Soler y las tablas con el portugués, Vingegaard reconoció que “sinceramente esperaba tener más distancia en la clasificación general”. Por ahora, el danés cuenta con 48 segundos de ventaja sobre el luso del UAE Emirates.
Vingegaard dice que “estoy contento con este margen de tiempo pero esperaba más, aunque espero aumentarlo de aquí a Madrid”. Queda una semana de carrera y Vingegaard ya empieza a descontar los días y en sus cálculos, apenas hay un día de transición. “Menos la etapa de Madrid, todas serán clave. Empezando por la etapa dura del martes, después la llegada en alto y la crono. Al día siguiente un final donde los abanicos pueden ser claves y luego la Bola del mundo”, narraba.
El danés está de regreso a Galicia, tierra en la que se ha impuesto ya en dos ocasiones en el O Gran Camiño. “Siempre disfruto corriendo aquí, aunque el tiempo no es el mejor en febrero. Pero ahora espero disfrutarlo más que todavía es verano. Me gusta esta región”.
También fue preguntado por el incidente que causó un manifestante al intentar saltar a la carretera y que provocó la caída de Javier Romo cuando marchaba en fuga al cruzar un policía la carretera para tratar de neutralizarlo. “No me he enterado exactamente de lo que ha pasado, he visto que Romo entraba en el pelotón y no sabía lo que había pasado exactamente. Todos sienten lo que está pasando. Entiendo que todos los que se manifiestan quieren ser noticia. Ellos creen que no lo son suficientemente y por eso siguen protestando de la manera en que lo hacen. Pase lo que pase, habrá más manifestaciones porque quieren tener difusión sobre la causa”.
El segundo protagonista del día, Mads Pedersen (Lidl - Trek) también compareció ante los medios y transmitió su alegría tras la victotria: "Tengo que decir que la manera cómo ha corrido hoy el equipo hace que la victoria sepa todavía más dulce. Teníamos a cinco corredores en el primer grupo. Cuando dos (Jay Vine y Louis Vervaeke) se han ido en el segundo puerto, parecían muy fuertes y han conseguido mucha ventaja de tiempo. Mis compañeros han trabajado muy duro para hacerlo posible. Al final, hace que ganar sea todavía más bonito. Todo el mundo sabía nuestro plan, todo el mundo estaba pendiente de nosotros, y aún así lo hemos conseguido. Es absolutamente increíble. No tenía otra opción, tenía que seguir todos los movimientos e intentar mantener el ritmo alto para que nadie quisiera atacar. Cuando Frigo ha saltado a 700 o 800 metros, ha sido perfecto, como si fuera un lanzamiento. Me he ido acercando lentamente, y después de la curva a 220 metros, era mi momento para lanzar el sprint. Realmente quería una victoria y hoy lo hemos logrado".