Marc Soler (UAE Emirates - XRG) no dejó títere con cabeza. El corredor catalán culminó su dominio y su victoria en la clasificación general de la Vuelta a Asturias con el triunfo de la ultima etapa de la carrera. Con el maillot de líder y con su conquista en el bolsillo, atacó en el Alto de Violeo, puerto de segunda categoría, y abandonó a su suerte a sus contricantes para marcharse en solitario y cruzar como campeón de la línea de meta en Oviedo. La lucha por el pódium se disputó hasta el último instante. La valentía y desparpajo de Txomin Juaristi (Euskatel - Euskadi) y Alexis Guerin (Anicolor - Tien21) forzándose hasta la extenuación persiguiendo al líder de la formación emiratí les dio su recompensa. El corredor la estructura vasca ocupó la segunda posición y el integrante del equipo francés, la tercera.
La Vuelta a Asturias bajó el telón de su edición centenario con una última etapa de grandes galones. Comenzó en Navia y terminó en la capital asturiana, Oviedo, tras 135,6 kilómetros intensos y vibrantes, ya que desde los primeros compases de la carrera se buscó formar la fuga con insistencia. Después de varios intentos, un grupo de 22 corredores, liderado por los favoritos y puntales de clasificación general, como el mismo Marc Soler, logró destacarse en la cabeza y emprender la aventura despegándose del pelotón principal. Aunque los puertos y la dureza del terreno norteño iría quebrando a los integrantes de la escapada poco a poco provocando que se fuera seleccionando.
El Alto de La Espina, de tercera categoría, fue el primer juez de la batalla. Ciclistas referentes de la vuelta como García Cortina (Movistar Team) o Samuel Fernández (Caja Rural - RGA) claudicaron en la ascensión. Las fuerzas comenzaban a flaquear y aún quedaban las cotas más exigentes de la jornada. Mientras, desde la parte de atrás, el pelotón achuchaba imprimiendo un punto más de velocidad para ir en busca de los escapados y neutralizarlos. La misión del grupo perseguidor era clara y concisa, en cambio la sucesión de puertos complicó que se pudiera cumplir. La fuga, compuesta por grandes escaladores, logró mantener su ventaja sin complicaciones.
La victoria estaba en la cabeza de carrera, y los integrantes del grupo eran conscientes de ello. Entonces, sin ningún tipo de miramiento, Marc Soler aceleró el ritmo en la ascensión al Alto de Violeo (3,6 km al 8,4%), segunda categoría, para ir en busca del triunfo de etapa y celebrar en solitario su dominio en la Vuelta a Asturias. Mattéo Vercher (TotalEnergies), Txomin Juaristi (Euskatel - Euskadi) y Alexis Guerin (Anicolor - Tien21) no se dieron por vencidos fácilmente y forzaron la máquina para ir en su caza. Nada pudieron hacer ante la potencia y la experiencia del catalán, que con una gran gestión supo calibrar sus fuerzas y completar su ataque levantando los brazos en Oviedo.
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