Sarah Gigante (AG Insurance - Soudal) voló sobre la montaña en la séptima etapa del Giro de Italia. La corredora australiana batió a todo el pelotón en la exigente y dura ascensión al Monte Nerone y se alzó con su segunda victoria parcial en la presente edición de la ronda italiana. La clasificación general se removió y cambió de dueña. Elisa Longo Borghini (UAE - Adq) se convirtió en la nueva líder, tras derrocar a Marlen Reusser (Movistar Team).
La etapa reina del Giro de Italia Femenino no ha dejado indiferente a nadie. El recorrido de la séptima jornada entre Fermignano y Monte Nerone sobre 150 kilómetros de trazado y 3.700 metros de desnivel hizo estragos en el pelotón y brindó un espectáculo de muchos quilates. Desde los primeros compases de la carrera, las corredoras estaban activas y con ganas de irrumpir con fuerza.
Cada repecho y cada rampa era un escollo en el camino y solo las corredoras más resistentes lograron permanecer en la cabeza de la carrera. Y a menos de 6 kilómetros para la línea de meta, Sarah Gigante atacó en busca de la victoria en la subida final y batiendo a Elisa Longo Borghini, quién no pudo seguir la rueda de la australiana. Marlen Reusser limitó los daños y luchó contra el cansancio para no perder una cantidad insalvable de tiempo.
Después de la etapa reina, Elisa Longo Borghini se apoderó de la punta de la clasificación general y se colocó a 22 segundos de su mayor perseguidora Marlen Reusser y a 1:11 de la ganadora del dia, Sarah Gigante. Mañana, domingo 13 de julio, concluirá y se descubrirá a la ganador del Giro de Italia Femenino 2025. Antes, el pelotón tendrá que superar un recorrido de 134 kilómetros entre Forli e Imola sobre un exigente trazado de media montaña con hasta ocho ascensos puntuables.
Clasificaciones
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