Probar una Trek Domane es probar una de las bicis pioneras en el segmento Granfondo. De hecho, es justo recordar que la primera generación de esta bicicleta data del año 2012, cuando la compañía de Wisconsin apostó por un modelo por aquel entonces de lo más innovador, combinando magistralmente dos conceptos hasta entonces antagónicos en una bici, el rendimiento y comodidad.
Desde entonces, la Domane no ha hecho más que sumar éxitos, demostrando así su increíble polivalencia, no sólo para cualquier aficionado, sino tmabién para los corredores profesionales, atesorando en su larga trayectoria victorias y puestos de honor en la Paris Roubaix, Strade Bianche y otras clásicas de primavera.
Domane SLR 9.7 altas prestaciones
La Domane que hemos tenido la oportunidad de probar es la versión SLR, por tanto, equipada con el mejor cuadro de la compañía para esta familia de bicicletas, fabricado en carbono OCLV 800, más liegero que el OCLV empleado en las Domane SL. La bici monta una transmisión Shimano Ultegra R8100 Di2 de 12 velocidades además de unas ruedas Bontrager Aeolus Pro de carbono con un moderado perfil de 37 mm, en nuestra opinión, el más equilibrado entre velocidad y aerodinámica para una bici Granfondo como esta.
IsoSpeed, el corazón de la Domane
Además de la absoluta calidad del cuadro Domane, algo que ya pertenece a la seña de identidad de la compañía norteamericana, hay que destacar que la auténtica alma de esta bicicleta reside en su sistema de microsuspensión IsoSpeed. la famosa rótula que otorga una notable capacidad de absorción a la bicicleta en su parte trasera. A diferencia de versiones anteriores, el IsoSpeed ahora se utiliza sólo en la cruceta entre el tubo horizontal y el del sillín, integrando en la misma rótula la propia abrazadera que ajusta el aprieta de la tija.
La Trek Domane SLR 9.7 en marcha
Las sensaciones que hemos tenido con esta nueva Domane han superado nuestras expectativas y desde luego, nuestra experiencia respecto a la generación anterior.
En términos generales, diremos que esta Domane (la cuarta generación en su historia) se comporta ahora como una bici con prácticamente el mismo confort que su versión anterior, pero siendo en todo caso más rápida y reactiva. Y es que esta Domane se ha vuelto más dinámica, con un comportamiento más ágil y preciso respecto a como la conocíamos antes.
Geometrías de la Trek Domane SLR, en todas las tallas
La bici reacciona ante el pedaleo enérgico gracias a la rigidez del cuadro, al mismo tiempo que ofrece una posición relajada y confortable para las largas distancias, gracias a la geometría endurance de TREK, con un reach más corto y ángulo de dirección más relajado que sus hermanas Émonda y Madone, el modelo escalador y aerodinámico de la marca, respectivamente.
Por lo demás, estamos ante una bici total, que se ha reinventado manteniendo su ya excelente confort en marcha, con un perfil más aero mediante una mejor integración de cables y del sistema IsoSpeed y con má sligereza. Una bici que ahora es más rápida, pero que mantiene al mismo tiempo su esencia Granfondo.
Ficha técnica
- Cuadro: Carbono OCLV 800 IsoSpeed, con compartimento para almacenamiento interno. Guyiado interno de cables.
- Grupo: Shimano Ultegra R8100 Di2
- Frenos: Shimano Ultegra R8100 Di2 160 mm disco delantero, 160 mm trasero.
- Ruedas: Bontrager Aeolus Pro 37 Carbono OCLV TLR
- Peso: 7,9 Kg en talla 56 (Sin pedales)
- Precio: 10.499 euros
Más información: Web oficial de Trek