Crónica: XXX Prueba Cicloturista Vitoria

Con notable éxito de partición y organizativo se celebró, el pasado sábado día 5 de Junio, una nueva edición, y ya van 30, de la Prueba Cicloturista Vitoria

admin

Crónica: XXX Prueba Cicloturista Vitoria
Crónica: XXX Prueba Cicloturista Vitoria

<!--[if gte mso 9]>

Normal 0 21 false false false MicrosoftInternetExplorer4

Una prueba organizada por la Sociedad Ciclista Vitoriana y que contó con un recorrido vistoso y exigente y que transitó por 4 comunidades autónomas (País Vasco, Navarra, La Rioja y Castilla y León) atravesando 7 puertos de montaña, entre ellos el mítico de “Herrera", para un total de 250 kilómetros, donde 208 cicloturistas, llegados de varias comunidades autónomas (País Vasco, La Rioja, Navarra, Castilla y León, Aragón, Madrid, Cataluña, Valencia…) se dieron cita a primera hora de la mañana en los exteriores de los frontones de Mendizorroza, donde estaba situado el punto de salida, para afrontar esta prueba en una mañana muy agradable (15 º), algo nublada pero con ganas de despejar.

A las siete de la mañana, se procedió a dar la salida. Con un buen ritmo y en medio de un gran ambiente, el grupo recorrió los primeros kilómetros. Así, se llegaba hasta las primeras estribaciones del Puerto de Opacua, donde poco a poco el pelotón se fue disgregando formándose varios grupitos. Por aquellos momentos el Sol ya empezaba a imponer su dominio, anticipando el gran protagonismo que tendría durante la Prueba. Tras el duro ascenso a Opacua, los cicloturistas se lanzaron en un descenso vertiginoso rumbo a Alsasua, aunque antes tuvieron que superar el Puerto de Urbasa.  Era el kilómetro 80 y aún restaban 40 para el primer control de avituallamiento sólido. En medio del camino estaba el Puerto de Lizarraga. Aquí ya se notó que las fuerzas empezaban a gastarse. Lizarraga se hizo duro, pero tras coronar su cima, sólo restaba dejarse caer hasta Abárzuza, eso si, con un molesto viento en contra.

En los frontones de la localidad navarra, población con notable tradición ciclista (cuna de José Miguel Etxebarri, manager general del equipo Caisse d´Epargne y de Benito Ros, 5 veces campeón del mundo de Trial en bicicleta) estaba situado el primer punto de control. Era el momento de sellar y recuperar fuerzas.

Aprovechando el receso, la organización entregó un recuerdo por su colaboración al Ayuntamiento de Abárzuza que fue recogido por su alcalde Arturo San Martín Morras. También, se impuso un maillot al cicloturista de Ayegui, Miguel Etxebarria Santiesteban en representación de todos los cicloturistas de la comarca, por su trabajo y dedicación hacia este deporte

Tras reponer fuerzas, los cicloturistas emprendieron camino hacia Laguardia donde estaba situado el segundo control de avituallamiento, pero su discurrir no fue sencillo, ya que antes de llegar a la Rioja Alavesa hubo que sortear las duras rampas del Puerto de Codés (18%) y el Puerto de Lapoblación.

En Laguardia, en las piscinas municipales, se situó el segundo punto de control de avituallamiento sólido. En grupos pequeños y cada vez más espaciados fueron llegando los cicloturistas. Era el kilómetro 198, se había cubierto gran parte de la prueba pero todavía quedaba lo más duro y las fuerzas cada vez eran menos, por ello descansar y reponer energías se hizo más necesario que nunca. Además, el calor estaba pasando factura. Los 31º que marcaban los termómetros se traducían en 40ª sobre el asfalto. Ello castigo de forma notable a los ciclodeportistas, agotando de forma prematura sus ya escasas reservas.

La organización, aprovechando el descanso, entregó un maillot conmemorativo de la Prueba a la cicloturista de Santurce Maribel Cabero Camargo, la más veterana de las participantes femeninas.

Tras el merecido y necesario descanso y con las fuerzas muy justas se afrontó el último tramo. En pequeños grupos o de forma individual cada cicloturista encaró de la mejor manera los últimos kilómetros. En la mente de todos ellos estaban las duras rampas de Herrera, fue el momento de regular, de meter todo el desarrollo, de exprimirse la máximo y agotar casi las últimas reservas. Desde la cima riojana - alavesa se divisaba Vitoria - Gasteiz, pero aún quedaba la trampita del Alto de Zaldiaran.

Después de muchos kilómetros y tanto esfuerzo, la última tachuela se convirtió casi en un coloso pirenaico, pero al fondo los frontones de Mendizorroza esperaban la llegada de los cicloturistas. Poco a poco, casi a cuenta gotas fueron arribando los ciclistas, en su rostro se reflejaba el esfuerzo realizado pero también la satisfacción de haber concluido la prueba. Todos, recibieron una medalla en bronce acreditativa de su participación en la prueba, una botella de vino de Rioja Alavesa de Bodegas Primicia, un pantalón-culot corto de ciclista y un lote de productos para la higiene masculina de Lea.

Al final de la prueba, la organización se mostró muy satisfecha de cómo había trascurrido la misma y del número de participantes, teniendo en cuenta las características de la prueba y el largo invierno que ha retrasado mucho la preparación de gran número de cicloturistas.

La edición del 2011, en la que se celebrará el 50 aniversario de la misma, ya está en marcha y se anuncian novedades.

 

Más información en: www.sciclistavitoriana.com