Esta ruta la hemos realizado gracias a la invitación que hemos recibido de Miguel Molleda, amigo personal y compañero de grandes batallas ciclistas, que, cada año, celebra durante el verano diferentes recorridos por las inmediaciones de Puentenansa, congregando a una grupeta de amigos, para recuperar la memoria de su padre, quien le iniciase en el ciclismo y fuera el responsable de su gran amor por este deporte.
Puentenansa kilómetro cero Esta localidad montañesa, cruce de caminos y culturas, es un lugar excelente para comenzar el pedaleo, que iniciaremos descendiendo, junto al curso del río, hasta llegar el emplazamiento conocido como Puente del Arrudo, punto donde giramos a la izquierda, cruzamos el río Nansa y emprendemos una explosiva subida. A partir de ahora la carretera serpentea entre vaguadas, convirtiéndose en un auténtico rompepiernas. Atravesamos Cabanzón, Casamaría y Merodio, para desembocar en la N-621; giramos a la derecha y nos encaminamos a Unquera. Si nos fijamos con detalle, en la otra vertiente del río Deva, junto al que pedaleamos en sentido descendente, existe otra carretera que será la que tomaremos una vez atravesemos Unquera, población a la que accederemos en breve. Giramos a la izquierda y nos dirigimos a Colombres y Siejo, para desembocar en la N-621 tras volver a cruzar el Deva. Ahora giramos a la derecha y ascendemos por una entretenida carretera por el principio del célebre Desfiladero de la Hermida.