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25 momentos estelares de Marco Pantani

En territorio transalpino, allí donde veneran de modo casi religioso su Corsa Rosa, el Giro de Italia, no existe figura que desate más pasión entre los tifossi que la de Marco Pantani. Nadie les ha hecho vibrar como “El Pirata" con aquellas arrancadas imposibles en los míticos puertos de los Alpes y Apeninos.

Ciclismoafondo.es

4 de noviembre de 2014 (15:41 CET)

Su capacidad, casi irrepetible, para escalar, su peculiar estética –rapado y ataviado siempre con un pañuelo en la cabeza que acompañaba con sus característicos pendientes y perilla-, al igual que su polémica y controvertida historia, son parte de la leyenda que le ha hecho imborrable para cualquier aficionado al ciclismo.

Desde sus primeros años en el profesionalismo –debutó en 1992- ya destacó como un portentoso escalador. En 1994, con los colores del Carrera, se coló en el podio tanto del Giro de Italia como del Tour de Francia, segundo y tercero respectivamente con tan solo 24 años. El futuro era suyo hasta que un durísimo accidente en la Milán-Turín, donde fue atropellado por un coche, le provocó una doble fractura en una de sus piernas que apuntó estuvo de acabar con su carrera deportiva.

Consiguió sobreponerse y volver con más fuerza que nunca. En el Giro de Italia de 1997 solo una caída provocada por un gato le aportó de la gloría y en el Tour ya demostró que era con diferencia el hombre más fuerte cuando la carretera se empinaba hacía el cielo. Solo la superioridad de Ullrich en la contrarreloj le privó del amarillo.

1998 sería su año. Firmó el doblete Giro-Tour, algo que nadie ha vuelto a lograr desde entonces, con algunas actuaciones para la historia como la épica jornada en la que atacó y sentenció a Ullrich en el Galibier.

Su dominio parecía extenderse también en el año 1999. ¿Cómo olvidar su victoria en Oropa tras sufrir un problema mecánico en la base del puerto y remontar todo el pelotón hasta el triunfo? Mandaba con portentosa autoridad en el Giro hasta que llegó aquella maldita mañana en la que su tasa de hematocrito demasiado alta provocó que la organización del Giro decidiera descalificarle. Desde entonces se desencadenó en su persona un duro pesar del que no fue capaz nunca de reponerse y que acabó sumiéndole en un mundo de oscuridad que se resolvió de la peor forma posible el 14 de febrero de 2004.

En homenaje a Pantani, y tras ofreceros las mejores fotografías de otros ciclistas clásicos como Perico o Induráin, hoy os mostramos las 25 mejores imágenes de la carrera de “El Pirata".

Las cifras de Marco Pantani

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