El Quick-Step Alpha Vinyl ha actualizado el parte médico de Julian Alaphilippe e Ilan Van Wilder, sus dos ciclistas accidentados el domingo en la montonera que se produjo a 62 km de la meta en la Lieja-Bastoña-Lieja.
Según comunica el equipo belga, "Ilan [Van Wilder] se sometió a una operación para corregir el daño sufrido en su mandíbula [una fractura], que fue realizada por el Dr. Pieter-Jan Van Bever. Los doctores estaban contentos con cómo fue la intervencióny él regresó a casa para iniciar un periodo de recuperación. Desafortunadamente, la naturaleza de la lesión y el procedimiento significa que no podrá participar en el próximo Giro de Italia".
Como se informó el mismo domingo, Julian Alaphilippe sufrió fractura de dos costillas y de una escápula, y un hemoneumotórax. Según informa el Quick Step en su último comunicado, "La complejidad de su condición significa que se requerirá un período de observación adicional antes de que se decida un camino de recuperación. Permanecerá en el hospital de Herentals por el momento".
🇫🇷 Romain Bardet qui vient au secours de 🇫🇷 Julian Alaphilippe #LBL 🙏🏼 pic.twitter.com/xGndR3qqZ7
— Roue Libre (@en_rouelibre) April 24, 2022
Sobre la montonera en el pelotón que afectó especialmente al campeón del Mundo, que cayó en una pequeña zanja al lado derecho de la carretera, Romain Bardet -el primero en socorrerle- explicó en la radio francesa RMC como vivió aquel momento: “Tenía mucho miedo por Julian. Caí del mismo lado y lo vi tres metros debajo de mí. Me dijo: 'No me puedo mover, no me puedo mover'. No venía nadie”, cuenta el francés del Team DSM. “Estas son escenas que no quieres en el ciclismo. Traté de llamar a la gente, los autos estaban bloqueados, me llevó una eternidad. Fueron solo 4-5 minutos, pero fue una escena realmente impactante”.
Además, en una entrevista concedida al diario L'Equipe, Bardet ha dado más detalles de como fueron aquellos instantes. "Cuando miré a mi alrededor, vi a Julian a 5 o 6 metros de profundidad y fue un shock emocional. No venía nadie y realmente necesitaba ayuda. Era una emergencia. No podía moverse o respirar. Realmente me temía lo peor. Tenía miedo de que tuviera una vértebra afectada. Cuando dejé la carrera después de rescatarlo, solo quería una cosa: saber cómo estaba. Al final me escribió a las dos de la mañana, cuando recuperó su teléfono, eso fue lo primero que hizo porque nos conocemos desde hace mucho tiempo. Espero que se recupere pronto".
