La mala suerte persigue en los últimos meses a Miguel Ángel López. El prometedor ciclista colombiano se vio obligado a abandonar en su primera ronda de tres semanas y gran objetivo del 2016, la Vuelta a España, debido a dos duras caídas en la primera semana que le provocaron múltiples erosiones y contusiones, además de la pérdida de tres dientes. Y tan solo dos meses después, se ha visto envuelto en otro accidente, en este caso entrenando, que se ha saldado con una fractura de tibia.
Según explica su entrenandor, la caída se produjo porque un coche rebasó de forma imprudente al grupo con el que entrenaba Superman López, que al ser el que rodaba más pegado a la derecha cayó por el terraplén de la carretera golpeándose la pierna. El ciclista del Astana fue trasladado a un centro médico donde se le realizaron las correspondientes pruebas que revelaron la fractura.
Por fortuna, López no tendrá que pasar por el quirófano y únicamente necesitará de la inmovilización de la pierna durante tres semanas para que la fractura comience a soldar