Uno de los ciclistas jóvenes más activos del pelotón, considerado por muchos como una futura estrella del deporte, carismático, impulsado por una gran pasión y ambición de éxito, Julian Alaphilippe, acaba de extender su compromiso hasta el final del 2019 con el equipo belga Quick-Step Floors.
En la presente temporada, Julian se lució en la París-Niza, ganando en la contrarreloj, conquistando el maillot verde y blanco y terminando quinto de la clasificación general.
Una lesión en la rodilla lo mantuvo apartado de la competición y se no pudo participar en las Clásicas de las Ardenas, el Tour de California (donde triunfó en 2016) y el Tour de Francia. Después de superar este contratiempo, Alaphilippe volvió a competir hace dos semanas, en el Gran Premio Cerami, y desde allí aterrizó en España, donde al terminar la tercera etapa de la Vuelta a Burgos se había colocado tercero de la clasificación general.
En palabras de Julian: "siempre fue mi objetivo quedarme con el equipo. Para mí, seguir con Quick-Step Floors es el escenario perfecto. He hecho muchos buenos amigos aquí y me siento en casa, es básicamente mi segunda familia. El apoyo que tengo de Patrick y el equipo me da mucha confianza. Extender mi contrato significa que puedo concentrarme 100% en las cosas importantes y continuar mi progresión. Tenemos un equipo muy fuerte que puede hacerlo bien en casi todas las carreras, así que no podría estar más satisfecho con donde estoy. Esto me motiva a obtener muchos otros grandes resultados con este equipo fantástico ".
Patrick Lefevere explicó por qué extender el contrato de Julian por dos años más fue una decisión fácil: "Firmamos con él hace tres años y medio, ya que vimos un brillante futuro en él y creímos que podíamos ayudarlo a ser aún mejor y alcanzar sus metas . Desde entonces, Julian ha crecido mucho y sólo estamos seguros de que no ha alcanzado su máximo potencial".