La Asociación Internacional de Ciclistas Profesionales (CPA) ha dicho "basta" mediante un comunicado a los controles antidopaje "que no respetan la vida privada de los ciclistas" y que consideran "intolerables".
Según una nota firmada por el italiano Gianni Bugno, presidente de la CPA, han llegado a la Asociación casos de corredores que han tenido que someterse a controles "el día de su boda, durante un entierro o el primer día de colegio de sus hijos".
Por si fueran pocos los ejemplos, ahora la CPA denuncia el caso del ciclista belga Pierter Serry (Quick-Step Floors), quien pasó un control en horarios en los debía participar en la gala del ciclismo de Flandes.
"Como si le hubieran detenido, en el momento de entrar en la gala ciclista le estaban esperando para pasar el control y tuvo que renunciar a la fiesta para atender a las autoridades antidopaje", comenta Bugno, quien denuncia el "modus operandi" que no tiene en cuenta los derechos y la vida privada de las personas.
Explica Bugno en la nota que los ciclistas pagan un 2% de sus ingresos para hacer posibles estos controles. "Son los únicos deportistas del mundo que pagan los controles antidopaje de sus propios bolsillos", dice el italiano, quien añade que "respetan las medidas requeridas para luchar contra el dopaje, pero por lo menos piden que se respete su vida privada".
En los próximos días, la CPA investigará quien ha dirigido el control a Serry y exigirá a los organismo implicados en la lucha antidopaje y a la UCI que establezcan un código de conducta para los controladores para garantiza la vida privada de los ciclistas en determinadas situaciones.