El suizo Stefan Küng (Groupama FDJ), campeón mundial de persecución en pista en 2015 y campeón suizo de contrarreloj, consiguió este jueves la victoria en solitario en la segunda etapa del Tour de Romandía (Suiza), de 174,4 km entre Le Locle y Morges, mientras que el esloveno Primoz Roglic (Jumbo-Visma) conserva el liderato.
Seis corredores se integraron en la escapada del día: Geminas Bagdonas (AG2R), Stefan Küng (Groupama FDJ), Jorge Arcas (Movistar), Frederik Backaert (Wanty-Gobert), Nathan Brown (EF) y Claudio Imhof (Swiss Team). En un día lluvioso y con el termómetro en 10 grados, el pelotón dejó hacer a los fugados hasta que, a 60 km de meta, el Bora y el Deceuninck empezaron a tirar del grupo.
La fuga comenzó a perder fuelle, pero Küng decidió prolongar su aventura en cabeza. Primero, incrementando el ritmo en la última cota del día y eliminando a tres compañeros de fuga, entre los que estaban Jorge Arcas. Y más tarde, tensando la cuerda sobre los dos compañeros restantes, en el último sprint puntuable, ubicado sobre un repecho, a unos 15 km de meta.
A partir de ahí, y con la lluvia arreciando, el suizó arriesgó sobre un piso mojado, y el pelotón no fue capaz de alcanzarlo. Küng paró el cronómetro de meta en 4h10:59, y el grupo llegó 59 segundos después encabezado por el irlandés Sam Bennett.
Küng ya había ganado dos etapas en Romandía (2015 y 2017), en ambos casos, también, con ataques en solitario.