Ni en los cálculos de los más optimistas estaba que 'Lucho' Herrera pudiera ganar la Vuelta a España de 1987 porque en ese competición apenas iba "a rodar" para preparar el Tour de Francia. Incluso, el jefe de filas era Martín Ramírez. Pero al final de 23 días de carrera Luis Alberto Herrera acabó como campeón de la Vuelta que finalizó el 15 de mayo de 1987.
De aquel triunfo de 'Lucho' Herrera con el equipo Café de Colombia han pasado 33 años, pero sigue imborrable pues fue la primera vez que un colombiano ganaba una de las tres grandes Vueltas por etapas. "En esa Vuelta a España el liderato me lo dieron a mí porque él iba a preparar el Tour de Francia, pero ocurrió que la carrera lo puso a él como el mejor de los nuestros y el equipo lo respaldó", recuerda Martín Ramírez a Efe. El técnico del equipo, el exciclista Rafael Antonio Niño, le dio a Ramirez el liderato del equipo porque había ganado el Tour del Porvenir y el Dauphiné Liberé, dos carreras de trazados montañosos como tradicionalmente ha sido la Vuelta.
Los favoritos de esa Vuelta a España eran el francés Laurent Fignon, fallecido de cáncer en 2010; el irlandés Sean Kelly, el español Pedro Delgado y el alemán Reimund Dietzen. El colombiano Herrera no estaba en esa lista. Pero finalmente el del Café de Colombia superó a Dietzen por 1 minuto y 4 segundos y a Fignon en 3´13", con Pedro Delgado cuarto a 3´52"
Herrera ganó la etapa de Lagos de Covadonga (11ª) dando una demostración de poderío en la montaña y se vistió de amarillo, el color por entonces del maillot de líder en La Vuelta. Ese día, el 4 de mayo de 1987, 'el Jardinerito' cumplía 26 años. Mantuvo el maillot amarillo durante los siguientes seis días hasta que el irlandés Sean Kelly, que ya había sido líder en la sprimeras jornadas, aprovechó una contrarreloj individual de 24 kilómetros en Valladolid (18ª etapa) para retomar el mando. Quedaban solo cuatro jornadas para el final.
Sin embargo, al día siguiente Kelly puso pie en tierra por una forunculosis. Ese día Fignon se hacía con el triunfo de etapa y se situaba tercero en la general, por delante de 'Perico' Delgado. Herrera recuperó el mando de la general al entrar segundo en meta y se distanció de Dietzen, su más peligroso rival de cara al título.
Los tres últimos días de carrera fueron controlados por los colombianos que finalmente lograron sellar ese primer gran éxito en La Vuelta para el país cafetero, éxito que repitió en 2016 Nairo Quintana con el Movistar Team. 'El Jardinerito', como se le conoce en Colombia, o 'el hijo de las montañas', como lo bautizaron en Europa por la facilidad con la que escalaba montañas, acaba de cumplir 59 años y sigue vigente en la memoria de los colombianos.
Dominio colombiano
Al final de los 3.921 kilómetros de esa Vuelta, divididos en un prólogo y 22 etapas, Ramírez celebró el poderío demostrado por los ciclistas colombianos: "Barrimos, porque Herrera ganó la general, la montaña y una etapa (Lagos de Covadonga), y el Manzana Postobón (el otro equipo colombiano) ganó la clasificación por equipos", recuerda. Además, Carlos Emiro Gutiérrez, Ómar Hernández y Francisco Rodríguez ganaron una etapa cada uno, y al margen de Herrera otros tres colombianos entraron en el top-10 de la general: Oscar Vargas, quinto; Henry Cárdenas, noveno, y Hernández décimo.
"Los equipos y las carreras han cambiado mucho pero aparte de Postobón ningún otro equipo colombiano ha ganado esa clasificación en alguna de las tres carreras más grandes del mundo", recuerda Martín Ramírez, que ahora atiende sus negocios particulares en Bogotá, entre ellos una farmacia.
"Lucho" Herrera no llegó a la Vuelta a España como un desconocido. Una etapa en el Tour del Porvenir (1982), tres en el Tour de Francia (una en 1984 y dos al año siguiente), más un título como campeón de la montaña, eran logros para no pasar inadvertido. Los escuderos de Herrera en el equipo Café de Colombia para el triunfo fueron Ramírez, Henry Cárdenas, Abelardo Rondón, Patrocinio Jiménez y Argemiro Bohórquez, todos ellos consumados escaladores. Y para trabajar en el llano estaban Marco León, Juan Carlos Castillo, Israel Corredor y Froilán Morales.
Tras el triunfo, el equipo fue recibido en Bogotá por el entonces presidente de Colombia Virgilio Barco. "Cuando estábamos allá no dimensionamos lo que se logró, pero cuando llegamos a Colombia, en la calle 26 en Bogotá no cabía la gente", recuerda Ramírez, quien tampoco supo hasta su regreso que la gente se aglomeraba frente a los almacenes que tenían televisores para ver cada etapa.
Ese triunfo dio pie a que salieran al mercado discos en los que se le cantaba a "Lucho" Herrera y a sus compañeros, mientras que los diarios locales escudriñaron cada arista de la vida del campeón y su familia. "Fueron ríos de tinta los que corrieron para contar todo lo referente a ese histórico triunfo. Es algo inolvidable", concluye Ramírez.
