De camino a Al Sawadi, la que iba a ser salida de la quinta etapa del Tour de Omán, las cosas ya no pintaban bien. Por la autopista en la que circulaba todo el convoy el fuerte viento levantó tanto la arena del desierto que, como si de una niebla tupida en una fría madrugada de invierno, cegó todo el horizonte. En la salida, con los coches aparcados, los ciclistas cambiándose, las bicis recién sacadas de los camiones que cada día las transportan fue repentino. De un momento a otro la arena lo cubrió todo producto de un fuerte viento huracanado que hacía hasta imposible estar al aire libre sin ningún resguardo.
Pablo Lastras y Alejandro Valverde corrieron al coche del Movistar Team para guarecerse mientras Joaquim Rodríguez tomaba de la mano unos metros más allá a Nibali y marchaban juntos a la reunión de directores, jurado y organización que estaba teniendo lugar al lado de la mesa del control de firmas. Así no se podía correr, no al menos partiendo desde ahí, donde apenas se veía a diez metros de distancia y el rostro se llenaba de arena en cuestión de segundos. “¡Ciclistas de salóoooon!”, gritaba entre risas Fran Ventoso.
Las radios locales pedían a los ciudadanos que no salieran a la calle. Hasta a los conductores profesionales se les obligó a que pararan por la tormeta de arena. Pero los ciclistas tenían que seguir en carrera. The show must go on.
De la reunión se acordó que todos los ciclistas deberían montarse en los autobuses fletados por la organización, las bicis de nuevo a los camiones, y que se iba a eliminar toda la primera parte de la etapa para dar la salida a los pies del circuito que iba a decidir la etapa (con el consiguiente traslado de toda la caravana, unos 100 kilómetros de coche y autobús para todos y la salida en medio de una carretera). Un recorrido con la subida y bajada a Bousher al Amerat al que la carrera decidió añadirle dos pasos más de los dos que estaban previstos, el primero de ellos sería neutralizado, y que según las condiciones después de inspeccionarlo se decidiría si disputar la etapa.
Ese primer paso fue la sentencia de muerte de la etapa. Se empezaron a escuchar un sinfín de explosiones en el pelotón, ruedas calientes que reventaban. Nada más dar el giro para dar la salida real, los ciclistas dijeron que hasta ahí habían llegado. Todos los ciclistas. Único. Un día histórico. Fabian Cancellara, Filippo Pozzato, Joaquim Rodríguez y Tom Boonen se erigieron como los actores principales. “Si no corréis hoy no habrá clasificaciones ni premios este año ni el que viene”, les amenazaba la organización. “Pero si nosotros queremos correr”, respondía Pablo Lastras, “pero así no se puede, dos han reventado la rueda a mi lado y a mi compañero Isaychev se le ha salido el tubular. Eso en la neutralizada, si seguidos en carrera le pasa al que va tercero del grupo que se le sale el tubular y puede haber una catástrofe”, comentaba Purito. “La pendiente era muy pronunciada y en el descenso tenías que frenar de golpe y con el calor reventaba”, añadía Rafa Valls.
El alicantino, en su primer día de líder del Tour de Omán era el primero que quería que la etapa se disputara con normalidad por la mañana para defender en condiciones normales su liderato. ·”Han reventado ocho o diez tubulares y ruedas también se han roto. Estaba preparado para defender el maillot y no es un buen día para la carrera porque se tenía que haber hecho la etapa pero la seguridad de los corredores tiene que ser lo primero”.
Al final la carrera quedó neutralizada por unanimidad. Histórico. Por una vez todos los ciclistas y equipos quería los mismo. “¿Quién ha ganado?”,preguntaba bromeando Pozzato al cruzar la línea de meta. “Ha sido la mejor solución para todos”, se felicitaba Joaquim Rodríguez. “Mucha gente dirá que esto nunca había pasado en el ciclismo, que antes no se anulaba nada…a mi padre también le cambiaban los pañales con un trapo y ahora yo a mi hijo lo hago productos más modernos, las cosas se van mejorando por suerte y la unidad que hemos tenido hoy se agradece”.
Tour de Omán 2015 – General
- Rafa Valls (Lampre) 18.05.44
- Tejay Van Garderen (BMC) 0.09
- Alejandro Valverde (Movistar) 0.19
- Rafal Majka (Tinkoff) 0.32
- Jacques Janse Van Rensburg (MTN-Qhubeka) 0.35