Valverde, arcoíris: “Es increíble, son muchos años luchando y al final se ha conseguido”

"Sí, llegué a pensar que este día no llegaría. Incluso hoy no lo tenía claro. Pero ya en la última subida me decía 'joder, voy bien y vamos tres'; ahí vi que podía ser", señalaba el murciano.

Con información de Ainara Hernando (en Innsbruck). Foto: PhotoGomezSport.

El podio de 2018: Valverde, campeón del mundo; Romain Bardet, plata; Michael Woods, bronce.
El podio de 2018: Valverde, campeón del mundo; Romain Bardet, plata; Michael Woods, bronce.

El ciclista murciano Alejandro Valverde no pudo ocultar su emoción tras proclamarse campeón del mundo de fondo en carretera en Innsbruck por delante de Romain Bardet, Michael Woods y Tom Dumoulin. “Es algo increíble. Son muchos años luchando y al final se ha conseguido", señalaba poco después de conquistar su primera medalla de oro mundialista.

Emocionadísimo, el corredor del Movistar no pudo ocultar sus lagrimas durante unos cuantos minutos e incluso ofreció las protocolarias declaraciones postcarrera a la UCI con un nudo en la garganta en sus primeras respuesta.

“Cuando hice tercero en el Tour, en la etapa de Alpe d´Huez, también lloré. Pero esto ha sido mucho más emotivo todavía", bromeaba Valverde en la zona mixta a preguntas de periodistas españoles. ¿Y qué sientes? “Una satisfacción enorme, una gran tranquilidad, y mucho agradecimiento a los compañeros de la selección. La concentración de Granada ha servido mucho porque hemos hecho un gran grupo".

Cuestionado sobre este momento, si llegó a pensar que nunca podría ganar una carrera mundialista, el murciano fue sincero: “Sí, llegué a pensar que este día no llegaría. Incluso hoy no lo tenía claro. Pero ya en la última subida me decía ‘joder voy bien y vamos tres’. Ahí vi que este año podría ser".

Sobre la llegada, explicó: “En el último kilómetro y medio me iban controlando. Sabía que venía Dumoulin, porque le iba viendo. Si llega, pues llega. Eso pensé. Prefería guardar. Luego tuve que arrancar desde lejos. Era una distancia larga, un sprint de fuerza pura".

“No podía fallar. Es algo increíble. Son muchos años luchando y al final se ha conseguido. Tengo que agradecer al equipo: la selección ha estado de diez. Sabía que no tenía que fallar, que estar ahí. Esto era un sueño para mí y al final se pudo conseguir", concluía.

Valverde recibió la medalla de oro de manos del tricampeón Peter Sagan.