El mejor Mathieu Van der Poel está de vuelta tras unos meses de parón e incertidumbre por sus problemas en la espalda. Reapareció con un sorprendente tercer puesto en la Milán-San Remo y la semana pasada logró su primera victoria del año en una etapa de la Semana Coppi e Bartali. Pero la imagen que ha dejado hoy en la 76ª edición de A Través de Flandes -clásica de cotas y pavés considerada la antesala del Tour de Flandes- se ha acercado mucho a la de sus mejores días.
Con gran sentido táctico y buenas piernas, el neerlandés del Alpecin-Fenix estuvo atento para meterse en el corte decisivo, que se hizo a 70 km de meta, y tras destacarse del mismo junto a Tiesj Bennot dentro de los dos últimos kilómetros remató por velocidad al belga del Jumbo-Visma para firmar una victoria imponente que le llena de moral de cara al monumental Tour de Flandes del domingo. Es la segunda victoria de Van der Poel en esta clásica, que ya ganara en 2019.
#DDVmen
— Dwars dr Vlaanderen (@DwarsdrVlaander) March 30, 2022
What a race! 🔥 @mathieuvdpoel wins Dwars door Vlaanderen after an eventful last few kilometers! 🙌 He beats @TiesjBenoot in the sprint. @Tompid completes the podium. #DDV22 pic.twitter.com/0cPNVzfaZt
El momento decisivo llegó a 70 km del final, en el Berg Ten Houte -cota de 1,1 km al 6,6%- donde INEOS puso un ritmo fuerte que rompió el grupo principal, marchándose Tom Pidcock, Ben Turner, Mathieu van der Poel, Tiesj Benoot, Victor Campenaerts y Stefan Küing. Tadej Pogacar, mal colocado, no consiguió entrar en un primer momento, en un despiste que le costó sus opciones en la carrera.
Con un buen entendimiento estos seis ciclistas abrieron hueco y se fueron a por el quinteto de cabeza -Nils Politt, Mathijs Paasschens, Kelland O´Brien, Aaron Verwilst y el Movistar Johan Jacobs, integrantes de una fuga tempranera que llegó a contar con más de cinco minutos de ventaja- a los que alcanzarían a 49 del final.
Un error de colocación había dejado a Pogacar fuera de un corte muy prometedor, y lo intentó subsanar en la siguiente cota (Kanarieberg, 1 km al 8,8%), donde se marchó en solitario con un ataque poderoso para iniciar una frenética persecución del grupo de Van der Poel. Parecía que el esloveno lo conseguiría -llegó a acercarse a 10"- pero delante no daban tregua y tras kilómetros de una bonita lucha terminaría por desistir y dejarse alcanzar por el pelotón principal.

El grupo de cabeza quedó reducido a ocho, con los seis integrantes del corte bueno más dos supervivientes de la fuga, Politt y O´Brien, que aguantaban los latigazos que se sucedían en las cotas. Tadej Pogacar, un campeón con orgullo, no tiró la toalla y en el último tramo adoquinado (Doorn, a 27 km) volvía a acelerar y a seleccionar su grupo. Solo podrían seguir su rueda Jan Tratnik y Valentin Madouas para formar un trío perseguidor que nunca lograría acercarse a menos de 30". A 10 km eran 45" y ya estaba claro que la victoria se jugaría delante. Pese a quedar sin opciones, Pogacar dio espectáculo y se llevó un buen entrenamiento y aprendizaje de cara al segundo monumento de la temporada.
Entre los ocho elegidos se sucedieron los ataques en los kilómetros finales. Lo intentaron Küng y Campenaerts en la última cota, Holstraat, y de nuevo Campenaerts -muy activo-, esta vez junto a Bennot, abrió un ligero hueco a falta de 4 km.

Pero tras un nuevo reagrupamiento el movimiento decisivo se produjo a falta de 1,7 km, cuando Benoot atacó y solo Van der Poel saltó tras él. Los segundos de ventaja que cogieron fueron definitivos para jugarse la victoria entre ellos al sprint, donde el neerlandés fue muy superior a un Benoot sin chispa en este tipo de finales, y al que solo le quedó aplaudir en señal de reonocimiento ante la nueva obra de arte que acababa de firmar Mathieu Van der Poel, quien llegará pletórico de moral a un De Ronde que se presenta apasionante con el añadido de otras figuras como Van Aert, Laporte, Mohoric, Asgreen, Stuyven...
A 5" llegaban los demás integrantes del grupo, con Tom Pidcock ganando el sprint por la tercera plaza, y a dos minutos el trío perseguidor, con Pogacar en décima posición.
Declaraciones de Mathieu Van der Poel: "Nos fuimos en la cota de Berg Ten Houte y la cooperación fue muy buena. Todos éramos corredores muy fuertes y era casi imposible atraparno. He ido a tope y lo he dado todo. Me sentí bien, pero seguro que no era el más fuerte en el grupo de cabeza. Cuando empezaron los ataques tuve que cerrar la brecha varias veces y eso me dolió mucho, pero creo que hice un final perfecto. Ya vi que Tiesj Benoot estaba fuerte y merece ser segundo también".