A pesar de que la etapa no contaban con dificultades ni peligro en forma de puertos que pudiesen animar a los ataques en el final como en la jornada de ayer en Antequera, Alberto Contador confesó que no perdió la concentración en los últimos kilómetros. “Nos han explicado por la radio cómo era el final y cuando lo hemos visto sabíamos que teníamos que ir a una. Theuns ha trabajado para mi también porque sabíamos que se podía perder tiempo. Pero hemos salvado el día sin problemas”.
Narró el madrileño que “el ritmo en la etapa ha sido del que llamamos ‘pajarero’ porque hay que dar pedales, hay momentos en los que si no estás bien posicionado te comen mucho los látigos”.
De cara a la jornada de mañana en la Pandera dice que “habrá que ver cómo recupero de estos esfuerzos, de estos dos días atrás y de ayer porque se nota en las piernas. Veremos qué tal responde el cuerpo”. Del fin de semana que se avecina, opina que “hay una etapa que es más explosiva, La Pandera y otra que si tienes un mal día puedes perder por completo no solo el podio si no hasta el top10. Se sube hasta los 2.500 metros, es larguísimo”.