La libertad de Jesús Herrada

Tras hacerse ciclista en el Movistar, este invierno emprendió el vuelo para recalar en el Cofidis, donde goza de carta libre para pelear por triunfos de etapa en esta Vuelta. Y algo más.

Ainara Hernando. Fotos: Bettini Photos

La libertad de Jesús Herrada
La libertad de Jesús Herrada

Necesitaba Jesús Herrada respirar este tipo de aire. El propio y único que a uno le da en la cara cuando goza de libertad. Por fin lo tiene. Ya lo disfruta. Siete años le ha costado. Los mismos que ha vestido el maillot del Movistar, puliéndose como ciclista, aprendiendo. Pero 27 años ya son muchos como para seguir en la escuela. Herrada ya sabe todo lo que debe para pedalear por sí mismo. Y sobre todo, tiene la calidad necesaria y las piernas para poder hacerlo con garantías.

Era la hora de volar libre. Lo entendió hace justo ahora un año; con la llegada de Mikel Landa supo que su talento ya no tenía hueco en el equipo de Eusebio Unzue. “Necesitaba un cambio". Agradecido por tantos años puso rumbo a Francia junto a su hermano Jose. En pack de dos llegaron a Cofidis, el equipo de los préstamos. El conjunto galo les ofreció un crédito que era casi como un cheque en blanco. Libertad absoluta a pagar en cómodos plazos: a base de ataques, pelea y, si se puede, victorias.

A la sombra de Nairo Quintana y Alejandro Valverde no podía elegir su camino. Explorar sus límites. Y con la llegada de Landa, menos. “Buscaba un nuevo reto". Y lo encontró Jesús. El primero, el de aprender francés, salir a lo desconocido después de siete años haciéndose ciclista en el equipo que ya era “como mi segunda familia". Quería “crecer como ciclista y marcarme nuevos desafíos".

La libertad de Jesús Herrada

Jesús Herrada está destacando en la Vuelta a base de meterse en fugas.

En el Cofidis los tiene. Y no hay más que ver sus resultados. Debutó en el GP de La Marsellesa y fue cuarto. Después fue quinto en la Vuelta a Valencia y 4º en Omán. Después puso rumbo al Tour de Francia en busca de luchar por triunfos de etapa, igual que está haciendo en esta Vuelta a España a base de meterse en fugas. La de hoy, camino de Luintra la tiene señalada. “Es un buen día para que llegue la escapada y poder pelearla", dice. Lejos queda ya todo el viento tragado a favor de sus líderes, anulando su talento y su potencia.

Jesús ya es libre. Y lo está disfrutando. “Hasta ahora en esta Vuelta he intentado estar cerca de los mejores en las etapas de montaña y no he perdido mucho tiempo en la general". Algo más de cinco minutos respecto a Simon Yates. “La general no es un objetivo en sí pero si las piernas van bien, no quiero dejarme caer, quiero estar lo más delante posible y, quizá, metiéndome en una fuga que llegue a meta con bastante tiempo, poder acercarme un poco más".

La etapa de hoy la tiene señalada pero no hace ascos a ninguna. “Cualquier día es bueno para ganar. Tengo hambre de victoria", asegura. Como para no. Su último triunfo data de junio del año pasado, el que le convirtió en Campeón de España. “Tengo fuerzas y muchas ganas de volver a ganar".

La libertad de Jesús Herrada

Jesús Herrada en la subida a La Covatilla, en la 9ª etapa.

Pedalea Herrada con la tranquilidad que le otorgó a todo el Cofidis el triunfo de Nacer Bouhanni en la 6º etapa al sprint. “Tras ese triunfo estamos con más confianza dentro del equipo. A partir de ahora, todo lo que nos venga, bienvenido será. Sabiendo que las cosas nos están yendo bien", se dice.

La Vuelta a España no será seguramente el último objetivo de la temporada para el ciclista de Mota del Cuervo. El conquense es, casi siempre, uno de los fijos en la lista de Javier Mínguez y, con su buen estado de forma, su experiencia y su potencia, su presencia está casi cantada. “Es un objetivo desde el principio de año", desvela Herrada. “Desde principio de año quería estar y más viendo cómo me van las piernas hasta ahora. Pero primero quiero centrarme en la Vuelta y después ya decidirá Mínguez".

De él, el seleccionador nacional dice que “es un ciclista de mucha clase". Ya lo demostró en el último europeo, donde se mantuvo bajo la lluvia en el corte bueno que se jugó el triunfo final con victoria para Matteo Trentin. “Ese día me sentí muy bien. El circuito no jugaba mucho a mi favor pero me encontré bien, tenía buen ritmo al venir del Tour. Y me dio la confianza de que puedo estar con los mejores". Que tiene motivos más que de sobra para haber elegido volar libre.