Selle Italia ha presentado la última evolución de su sillín con más historia, el nuevo Flite Boost, que se caracteriza por una forma más corta y compacta de 248 mm de longitud, en vez de los 275 mm que tenían los sillines de la familia Flite hasta ahora, y que añade, sin perder el estilo elegante de líneas sencillas de sus predecesores, mayor comodidad al tradicional asiento plano de la gama gracias a un mullido más cómodo y a su cobertura de Fibra-Tek.
Es la última versión de un modelo que lleva 30 años en el mercado y que ha sido la elección de muchos profesionales y de los cicloturistas más exigentes porque combina ligereza, comodidad y una estética reconocible. El Flite Boost mantiene la clásica forma en «T» de todos los Flite y, como ellos, se trata de un producto que se fabrica totalmente en Italia. Además de una nueva forma más compacta y aerodinámica, el sillín Flite Boost estrena un diseño en el que destaca un nuevo logo con un corte dinámico que, según la marca, recuerda el impulso del pedaleo.
Antes de llegar al mercado, los ciclistas profesionales que utilizan la marca lo han estado probando en las mejores carreras del mundo. Entre ellos, Mathieu Van der Poel, quien lo utilizó en enero en el reciente Campeonato del Mundo de ciclocross celebrado en Dübendorf, Suiza, donde se hizo con el maillot arcoíris.
Un modelo histórico
En 1990, Selle Italia presentó el Flite y la historia de los sillines cambió radicalmente con la llegada de un modelo ultraligero -fue uno de los primeros sillines que consiguió bajar de los 200 gramos- que rápidamente se convirtió en un icono entre ciclistas profesionales y aficionados.
Bart Brentjens se proclamó campeón olímpico en Atlanta 1996 -fue primer campeón olímpico de MTB- sobre un Flite, Marco Pantani consiguió su doblete Giro y Tour en 1998 con un Flite personalizado y la leyenda del sillín se mantiene en nuestros días porque sigue siendo la elección de ciclistas como Philippe Gilbert, Caleb Ewan o el propio Mathieu van der Poel, que demuestra que es un sillín perfectamente válido para cualquier modalidad.
Seis sillines diferentes
El nuevo Selle Itaia Flite Boost está disponible en tres versiones diferentes según la construcción de sus raíles: Kit Carbonio, TI316 o Manganeso (TM). Además, cada una de estas versiones estará en las tiendas en 2 tamaños del sistema biomecánico idmatch desarrollado por la marca: S1/L1 -sin agujero central- y S3/L3 con un agujero central Superflow. En total, 6 sillines entre 157 y 243 g con los que la marca italiana busca prolongar la tradición de éxito de uno de los sillines con más historia del ciclismo.
FLITE BOOST KIT CARBONIO SUPERFLOW
Precio: 284,90 €
Peso: S 157 g - L 162 g
Railes: Carbono
Dimensiones: S 135x248 mm / L 145x248 mm
Precio: 284,90 €
Peso: S 173 g - L 180 g
Railes: Carbono
Dimensiones: S 135x248 mm / L 145x248 mm
Precio: 214,90 €
Peso: S 194 g - L 199 g
Railes: Titanio
Dimensiones: S 135x248 mm / L 145x248 mm
Precio: 214,90 €
Peso: S 210 g - L 218 g
Railes: Titanio
Dimensiones: S 135x248 mm / L 145x248 mm
Precio: 129,90 €
Peso: S 230 g - L 233 g
Railes: Manganeso
Dimensiones: S 135x248 mm / L 145x248 mm
Precio: 129,90 €
Peso: S 240 g / L 243 g
Railes: Manganeso
Dimensiones: S 135x248 mm / L 145x248 mm